“Rinde que da gusto” es el slogan que muy bien le ha funcionado a Harina de trigo haz de oros para ser la reina del mercado. Aunque por estos días el precio está por las nubes, debido a los altos costos del trigo extranjero que es el que se usa en el país para la industria y del dólar, pan se vende y se come todos los días; y según estudios de mercadeo, nueve de cada diez panaderías del país, así como las abuelas, usan para sus amasijos y para hacer el pan y los hojaldres y el pan de bono y los tamales la harina del inconfundible logo de espigas doradas y letras de intenso color rojo.
La empresa dueña de la marca estrella Haz de oros, Harinera del Valle, es la líder del segmento con ventas anuales superiores a los mil millones de pesos, según sus últimos reportes financieros. Aunque es una compañía más caleña que el cholao y sus plantas principales no se han movido del Valle del Cauca, el origen de esta empresa está kilómetros más al sur del país, en la fría Pasto del fronterizo Nariño y se remonta a los años 50 del pasado siglo.
Le puede interesar: Los dueños de Mundo Aventura y Salitre Mágico enriquecidos a punta de planes de domingo
El fundador de la Harinera del Valle, que hoy es dueña de 40 marcas más, entre ellas Pastas Conzazoni, San Remo y la Muñeca, los aceites Oleocali y Premier y la también famosa harina para hacer arepas Doña arepa, y que exporta a 12 países, fue don Arcesio Paz Paz, un pastuso que nació en la primera década del siglo pasado y vivió hasta los primeros años del siguiente. Murió con 96 años encima.
Don Arcesio, hijo de gente humilde de Nariño y veterano de la guerra contra el Perú que se dio en los años 30, cuando él tenía 23 años, le dijo no a seguir vistiendo el camuflado, porque su sueño era hacer empresa, sin saber tan siquiera de qué o cómo la haría. Trabajó como albañil y conductor y luego, reuniendo ahorros y préstamos puso la cuota inicial de dos camiones, que fueron la primera piedra para empezar a hacer realidad el sueño.
Unos años después don Arcesio y un colega camionero, vendieron sus carros y sin saber mucho del negocio compran un molino de trigo en Pasto que se llamaba Harinera del sur. En 1949 don Arcesio se casó con Rosa Marina Bautista y siete años después, huyéndole al frio pastuso por recomendación médica, vendió su participación en la Harinera del sur y se trasladó a Cali a donde llega sin empresa, pero ya sabiendo de molinos y trigo y monta en Cali la empresa Harinera del Valle, con su único producto harina de trigo que bien llamó Haz de oros, y que es la joya de la corona, el producto que lo hizo un reconocido empresario y que lo volvió millonario.
Pasaron quince años para que don Arcesio comprara el molino Roncaval en, Palmira, vecino a Cali, con el que amplió su producción de su harina que rinde que da gusto. Tomó vuelo la empresa con la asesoría de su hijo primogénito Carlos Arsecio Paz, quien desde 1983 tomó las riendas de la compañía hasta el 2013, cuando por diferencias familiares terminó marginándose de la operación de la compañía.
En los años 80 y 90 se hicieron con pastas La Muñeca, Doñarepa, Doñatorta y Pastas San Remo, que rápidamente se volvieron productos populares en el mercado de los hogares colombianos. Hoy en día Harinera del Valle cuenta con siete plantas de producción, sedes de la empresa en 13 ciudades, vende y distribuye directamente en 600 municipios de Colombia y en 12 países, entre los que están Costa Rica, Panamá, Chile, Ecuador, Estados Unidos, España, Perú, República Dominicana, Trinidad y Tobago, Canadá, Italia y Curazao, donde la harina Haz de oros también ha llegado a mandar la parada.
Con muchos productos bandera, que están en la memoria y el afecto de los colombianos se consolidaron como grupo económico con inversiones en distintas ramas de la producción distintas al sector de alimentos. Propietarios del Ingenio María Luisa, tienen peso en compañías como el Banco de Bogotá, Fabricato, Proleche y Promigas, además de ser accionista del Puerto de Buenaventura, convirtiéndose los Paz Bautista en una familia que pesa en el Valle del Cauca y desde allí en toda Colombia.
