El segundo socio comercial de Colombia, después de Estados Unidos, es España y son cada día mayores sus inversiones y negocios en el país, desde infraestructura hasta en el sector financiero y de consultoría. Algunas de estas empresas como Sacyr, con grandes inversiones en obra pública, han estado en el ojo del huracán y aprovecharon la visita oficial del presidente español Pedro Sánchez para abordar temas de contratos pendientes o con dificultades.
Su presidente, Manuel Manrique, aterrizó en el vuelo oficial y buscará desatascar el megacontrato del Canal del Dique que el gobierno del presidente Duque no alcanzó a dejar firmado.
José Antonio Llorente, fundador de Llorente y Cuenca, también llegó al país a echarle un ojito a los principales clientes de su consultoría estratégica como el grupo Gilinski, Microsoft Colombia y Promigas. El representante de Llorente y Cuenca en EEUU es Juan Felipe Muñoz, uno de los asesores de comunicaciones del expresidente Juan Manuel Santos.
Ricardo Domínguez García-Baquero, presidente de Navantia (compañía estatal española) llegó más en plan de buscar aliados para emprender negocios, no así el presidente de Indra, la empresa que maneja el polémico software de la Registraduría cuyos directivos conocieron al presidente Petro en su encuentro con empresarios españoles en Madrid durante su campaña presidencial.
Su nuevo CEO, el catalán Marc Murtra, quien lleva pocos meses en el cargo, viajó con el presidente Sánchez, con quien además tiene afinidad política, igual que con el presidente colombiano por su cercanía con el Partido de los Socialistas de Cataluña.