La controversia de Dodo es un libro de ficción escrito por el Literato Pablo Emilio Obando, que recoge las inquietudes de los animalistas frente a los abusos a estos seres vivos.
Definitivamente, Dodo ha sobrepasado los límites de lo imaginario, lo novelesco; para convertirse en una realidad que impacta la vida de sus lectores, el autor se ha dedicado a difundir esta obra no solo entre intelectuales, académicos y lectores habituales, sino también entre los niños, las juventudes, líderes de barrios, mercados de abastos y la comunidad en general.
Para el Centro de Pensamiento Libre es un verdadero honor tener a Pablo Emilio como uno de sus miembros fundadores y como uno de los escritores más prolíficos de América Latina. El profesor Obando se ha caracterizado por su versatilidad, ingenio, gracia y acuciosidad en las diferentes temáticas que aborda.
Con su pluma ha escrito más de mil publicaciones de carácter periodístico, investigativo, histórico, educativo y literario. Entre sus obras más representativas encontramos: La filosofía de la gallina, Testimonio de una insurrección ciudadana, Tomás Hidalgo Calvache, Apuntes para una nueva historia, La loca del muelle de San Blas, Historias tras la historia, Diario de un maestro de escuela, Belba o El país del rey Cáscara de Huevo, Luis Delfín Insuasty Rodríguez, El pueblo ante la historia, Apuntes para una nueva historia, El abuelo sobre la vejez y Solo los Tontos son Importantes, libro que tuve oportunidad de prologar; entre muchas otras que dan fe de su vigor literario.
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En esta oportunidad se aparta de la narrativa histórica, de lo técnico, para adentrarse en los laberintos de lo novelesco, conservando la sátira como caracteriza de sus escritos.
Sobre esta nueva obra han escrito intelectuales y periódicos de la talla del escritor Luis Gabriel Rodríguez de la Rosa, la Abogada Elsy Melo Maya, la líder animalista Yerly Mozo, el escritor Emilio Jiménez, el PhD. Pbro. Manuel Dolores Chamorro, el líder Ambientalista y Presidente de Sapiens Agro. Octavio Cruz González, la investigadora Ing. Sandra Liliana Pinto; el Historiador Jorge Enrique Esguerra y los portales Diario Del Sur, Centro de Pensamiento Libre, Página 10, las Las20rillas y el portal Latinoamericano Esnoticia.co.
Imagen: Cortesía
El Dodo (Raphus cucullatus) era un ave no voladora endémica de la isla Mauricio, en el océano Índico, que se extinguió por culpa del hombre: el último ejemplar vivo fue visto en 1662 Algunos consideraron que era una criatura mítica, alcanzó fama mundial en Las aventuras de Alicia en el país de las maravillas (1865), la novela de Lewis Carroll.
En la historia de nuestro planeta se han documentado por lo menos cinco extinciones masivas, la más reciente ocurrió hace 65 millones de años al final del periodo Cretácico y acabó con el “Parque Jurásico”, es decir, con los dinosauros, además de muchas otras especies. Ahora asistimos a la sexta extinción masiva, pero esta vez ocasionada por el propio ser humano.
Rodolfo Dirzo, de la Universidad de Stanford en California, ha dicho “Claramente, la defaunación es tanto un componente ubicuo de la sexta extinción masiva del planeta como uno de los principales ejes impulsores de cambio ecológico global”.
Los datos, presentados en una colección de ensayos en la revista Science, son alarmantes 322 especies de vertebrados terrestres se han extinguido desde el año 1500, y la media de reducción del 25 % del resto de individuos en todas la especies, refleja que la realidad es peor que las extinciones por su efecto en los ecosistemas.
El cuadro es aún más preocupante entre los invertebrados, con reducciones del 45 % en la población de dos tercios de las especies examinadas. Los científicos han acopiado el término “defaunación” (un símil de deforestación) para referirse a este preocupante suceso.
Pues bien La Controversia de Dodo, busca dirimir este conflicto entre los hombres, el medio ambiente y los animales; bajo la excusa de definir si éstos últimos tienen o no, alma; se llama a una reflexión sobre el papel del Homo Sapiens, no solo en la preservación de la especies, el medio ambiente; sino en su propia existencia.
Muchas especies se han visto expuestas a la extinción debido, en muchas ocasiones, a la intervención del ser humano. Muchas veces de manera directa, otras veces de forma indirecta, a través de la intervención de los hábitats y ecosistemas y ahora la problemática del cambio climático.
Aún estamos a tiempo para mitigar las tasas de extinción; creando zonas de refugio para la vida silvestre o especies protegidas, así como tener espacios compatibles para la vida silvestre en nuestros propios entornos.
Es increíble la cantidad de seres sintientes que hemos llevado a la extinción durante los últimos siglos, además del Dodo, tenemos: Lobo de Tasmania, Pez de mano liso, Melomys rubicola de Bramble Cay, Delfín del río Yangtze, Rinoceronte Blanco del norte, guacamayo de Spix, Paloma pasajera, Quagga, Íbice de los Pirineos, Sapo Dorado, Leopardo de Zanzíbar, Po'ouli, Gran Mariposa Blanca de Madeira, Cotorra de Carolina, Rinoceronte Negro de África Occidental, Pez Cachorro de Tecopa, Lobo de las Malvinas, Tigre de Sumatra, Boa excavadora de la Isla Redonda, Leopardo Longiblando, Carpintero Imperial, Tortuga Gigante de Pinta, Mariposa Azul Alcon holandesa, Ciervo de Schomburgk; entre otros.
En cuanto a la extinción del Dodo las versiones más difundidas apuntan a que marineros cazaron y se lo comieron hasta su extinción, sin embargo lo más probable es que las ratas entre otros animales traídos por los marineros en sus embarcaciones, causaran su declive. Según BBC probablemente las ratas se comieron los huevos del Dodo y otros animales superaron al ave en sus fuentes de alimento.
Con un relato muy agradable, un lenguaje sencillo y claro, el autor recoge entre sus líneas la necesidad de rescatar los derechos de estos seres sintientes, que de la mano del Homo Sapiens, pueden evitar su propia extinción.
