El gobierno del presidente Petro inició el jueves 4 de agosto en la Sierra Nevada de Santa Marta, luego de la concreción de un ritual con autoridades indígenas que los medios de comunicación han catalogado como una “posesión simbólica”, pero que en la profundidad del pensamiento Wintukwa o Arhuaco es mucho más que un suceso meramente simbólico, o folclórico, como lo han venido catalogando algunos.
Los mamos, autoridades holísticas de los pueblos de la Sierra, preparan con anterioridad estos rituales con previa consulta a los mayores espirituales, a los padres y madres ancestrales que habitan en cada uno de los elementos naturales y materiales que componen el complejo mundo del conocimiento donde todo tiene a’nugwe, un poderoso concepto propio que correlaciona vida, espíritu, poder, y capacidad de transmisión de conocimiento que poseen las montañas, ríos, lagunas, piedras y todo en cuanto se desenvuelve el mundo material del pueblo arhuaco. Así, todos los seres de la naturaleza poseen a’nugwe, y los elementos materiales creados por los humanos en el plano de la vida poseen a’nugwe, el hilo, el cultivo, la flecha, las prendas de vestir, la mochila, etc.
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Al presidente Petro le fueron entregados dos bastones, que en iku’n, idioma de los Wintukwa se denomina kankuamo, que sostiene el principio de la madera, de los árboles, de la naturaleza, esencia de la vida y sostenibilidad del pensamiento. Si hiciéramos un comparativo con los lexemas de las palabras en castellano podríamos acercarnos a que la raíz Kan, en iku’n, transmite estos principios de significado, madera, vida, esencia, principio.
Así encontraremos palabras con esta raíz cómo kankuruas, centros de pensamiento, donde la madera es el elemento material más representativo de esta construcción o como la kankawarua, una banca de madera donde los mamos antiguos se sentaban para hacer sus trabajos espirituales y mantenerse en reflexión permanente.
Al presidente Petro le fueron entregados dos de estos kankuamu le fueron entregados juntos, porque deben permanecer juntos para sostener la dualidad equilibrada entre los sentimientos y el pensamiento, entre lo frío y lo caliente, entre lo femenino y lo masculino, entre lo negativo y lo positivo.
Estos kankuamu tienen a’nugwe, tienen vida propia, tienen alma, espíritu, y requieren permanentemente de alimentos para sostenerse. Estos alimentos serán el inicio de las decisiones que tomará el presidente, serán sujeto de consulta permanente de los padres espirituales a los cuales fueron encargados. Los mamos, a través de los kankuamu, serán consejeros del presidente de manera espiritual, coadyuvando al equilibrio requerido para tomar decisiones en el ejercicio del poder político.
Al presidente Petro le entregó esta misionalidad uno de los mamos Wintukwas que se ha mantenido en aislamiento cultural de manera autónoma. Mamo Kunchanawimgamu, o Mamo Kuncha, quien proviene de un linaje de autoridades espirituales especializadas en el ejercicio de la salud, del tratamiento de enfermedades, de la curación del alma de la naturaleza. Mamo Kuncha decidió no aprender castellano para que no se le perdieran palabras propias heredadas de sus ancestros. Mamo Kuncha recomienda siempre hablar bien, porque las palabras enferman, o curan, por eso delega esta responsabilidad en el presidente Petro para que se desempeñe en su labor arraigado al conocimiento que históricamente ha sostenido el mundo espiritual y material de los pueblos de la Sierra Nevada de Santa Marta.
