Doctor,
Felipe Harman
Alcalde de Villavicencio.
La Ciudad.
Cordial saludo.
Recientemente (en la segunda quincena del mes de junio de 2022), usted presentó la rendición de cuentas de su gestión como primera autoridad del municipio de Villavicencio y correspondiente a la ejecución del Plan de Desarrollo vigente y del Plan de Acción de año 2021, obviamente dentro de los términos de la ley y los manuales que orientan la administración pública colombiana.
Seguí por las redes sociales con mucha atención dicha rendición de cuentas y durante el transcurso hice algunas observaciones y comentarios que fueron descalificadas por usted con un comentario en mi “Wasap”, cuyo sentido refleja un nivel de intolerancia que contradice el espíritu de la rendición de cuentas y de los mecanismos de participación ciudadana.
Quiero recoger en esta comunicación las principales observaciones a dicha rendición de cuentas, por cierto, a mi parecer, bastante maquillada y distorsionada por una retorica cargada de elogios y aplausos de sus barras de seguidores que lanzaron amenazas y presiones con quienes expresamos nuestro desacuerdo con los informes presentados.
Empiezo por señalar que los reportes sobre el sistema de movilidad en Villavicencio son bastante mediocres; es increíble que a solo 18 meses del fin de su gobierno, en 2023, lo único que usted tenga para mostrar en este renglón sea un contrato de consultoría por casi 3000 millones de pesos a unos operadores que fijaran los términos de una contratación para organizar el Plan Maestro de Movilidad y el Sistema Estratégico de Movilidad de la ciudad por un valor cercano a los 100.00 0 millones de pesos (¿se replicara acá el caso de Vitalogic en Bucaramanga con Hernández para el tema de las basuras?).
30 meses de su mandato para solo anunciar esa consultoría mientras miles de ciudadanos deben padecer un servicio que más que eso es un ultraje y un insulto al derecho que tienen los ciudadanos a movilizarse en condiciones adecuadas: busetas obsoletas, conductores sin mínimos niveles laborales y educativos, vías destruidas (desde la Madrid, Villa Juliana, Porfía, Pinilla, la Reliquia) y monopolios de empresas penetradas por mafias interesadas en acumular riqueza y en explotar pequeños propietarios y conductores sometidos a las peores condiciones humanas. Terminará su gobierno y la herencia será un sistema de movilidad caótico y de mala calidad
La administración pública de la alcaldía no registra cambios significativos, no obstante, los anuncios de su plan de desarrollo para transformar el gobierno de la ciudad con el fin de modernizarlo y garantizar un desarrollo institucional adecuado y en los términos de la transparencia y la democracia participativa. En su alcaldía sigue muy campante el clientelismo político (bien manipulado por el ex gobernador Ajara y por los voceros regionales de la Parapolítica y los clanes uribistas de la mafia), la contratación a dedo (que muy seguramente llevara a repetir el caso de la famosa Refinería saqueada de Ajara), la indolencia de su burocracia y el bloqueo a cualquier forma de participación ciudadana.
Sus funcionarios no responden los derechos de petición, ni las quejas, ni los reclamos de la gente, que es lo mínimo que debe hacer un gobierno; las Veedurías ciudadanas son bloqueadas y estigmatizadas. En su gobierno impera un sistema de gestión caudillezco y personalista, muy al estilo feudal en que los ciudadanos y ciudadanas son vist@s como unos siervos y unos personajes de segunda. Es aberrante que eso ocurra en pleno siglo XXI.
La participación ciudadana en su alcaldía es más un favor personal y no el reconocimiento de un derecho. Desde las últimas semanas de 2021 intentamos construir una política pública para la participación democrática de los ciudadanos, pero tal estrategia nunca se hizo efectiva porque sus consultores y funcionarios abandonaron esa responsabilidad y al día de hoy no existe una política institucional sobre la participación ciudadana tal como lo ordena la ley, la Constitución nacional y su Plan de Desarrollo.
El tema de la política de vivienda anunciada por usted con entrega de apartamentos, legalización de barrios y actualización del Plan de Ordenamiento Territorial esta secuestrada por una red oscura de traficantes y operadores que han establecido una red de peajes en Piedemonte (¿Óscar Osorio?) como entidad encargada de las nuevas urbanizaciones y bloques de apartamentos anunciadas desde su despacho. La legalización de barrios es un calvario que atropella a las comunidades por el sistema de favores orquestados desde Planeación Municipal y Control físico; y los cambios en el POT no se visualizan en los términos anunciados en el Plan de desarrollo para alcanzar el objetivo del derecho a la ciudad.
Las obras de la Empresa de Acueducto son asignadas a dedo, sin control de calidad y sobre los precios unitarios, generando sobrecostos y presuntos enriquecimientos de operadores y funcionarios.
En el tema ambiental hay vacíos que son evidentes para todos como el abandono del río Ocoa y el Guatiquia, convertidos en basureros y en cloacas pestilentes con graves daños en las comunidades.
Hay aspectos educativos (calidad), de la salud (cobertura y calidad), del empleo (informalidad masificada), de la atención de las victimas de la violencia que ameritan un análisis mas profundo. De estas materias nos ocuparemos en próximos documentos que pondremos a consideración de la ciudadanía, la que convocaremos con nuestra Red de Veedurías ciudadanas a Audiencias públicas, que ojalá tengan la garantía y la protección de su gobierno, como lo ordena la Ley.
Atentamente
Horacio Duque Giraldo
Red de Veedurías Ciudadanas del Meta.
Cc 4406725
3196047867