No quería gastar ni tiempo ni mente intentando conectar ideas dedicadas al ingeniero. Pero viendo que ya llega al colmo de rebosar la copa de lo vergonzoso, lo descarado y grotesco que es ver las redes repletas de ese sujeto desagradable, pues no queda otro remedio que escribir. Escribir sobre lo que se ve. Y más que hacerlo hacia el Ingeniero, es más un llamado a la cordura y a la sensatez ciudadana.
La gran revelación de la verdadera cara del cuchito, empezó por el efímero discurso que pronunció apenas se dieron los resultados de la primera vuelta, desde la elegancia de la cocina de una de sus tantas propiedades. Después de dicho discurso, en los días venideros, se desató la cascada de videos, desenmascarando lo que parecía ser un viejito gentil y amable y lo que resultó fue la evidencia de una mueca macabra, repudiable y vergonzosa que se escondía tras una máscara de cambio y anticorrupción.
Ya van varios días de colapso virtual, pues sólo se observan videos del viejito, como si los demás temas de interés se hubieran esfumado. Los asesinatos a líderes sociales, pasan desapercibidos. Pero bueno, casi siempre pasan desapercibidos. Una nota informativa de unos segundos en t.v. es más que suficiente para denunciar el asesinato a varios ciudadanos que dieron su vida por defender los derechos humanos, la tierra y la dignidad. Es pan de cada día.
Varios escándalos. Uno de los más sonados fue cuando pronunció que las mujeres deberían quedarse en la casa, porque son invasivas, porque lo que realmente quieren los ciudadanos es lo que el marido dice, no ellas, y que deben quedarse en la casa, con los hijos. Que la crisis económica las obligó a salir, pero que deberían volver al hogar. Otro escándalo reveló, que las venezolanas son fábricas de chinitos pobres, y pues no se pueden matar ni echarles plomo. Y otro, que es admirador de un gran “pensador” alemán, llamado Hitler. Luego salió diciendo que se le chispoteó.
Además, en uno de tantos videos, haciendo gala de su gran auge económico a partir de la construcción de casas, afirma que es una delicia, que un hombrecito le pague durante 15 años los intereses de una de esas casas, que las hipotecas son la vaca que da leche. Él mismo reconoce que los apartamentos que construye y delega a crédito, son un atraco. La gente ríe y se mofa en otro de los videos.
No se puede creer que coincidan las palabras exactas del señor Burns, de una caricatura de Los Simpson, cuando afirma que “se necesita que los empresarios entiendan que el mejor negocio del mundo es tener gente pobre, con capacidad de consumo, porque los pobres consumen toda la plata (en el mes)”. Rodolfo vocifera las mismas palabras, las mismas ideas de una manera casi exacta, como si se tratara de un guion estudiado.
Siguiendo con esta idea machista, constantemente toma un referente del término prostituta como algo peyorativo y ofensivo. Utiliza una labor de género como una expresión para denigrar e insultar, desconociendo todo tipo de profundidad en la necesidad social, cultural y económica que lleva a esos términos a una gran parte de la población femenina, no sólo la sociedad colombiana, sino la sociedad histórica y mundial.
Tan incoherente que lo que quiere es que la gente vaya al mar, y que reciba drogas gratis, desconociendo que la problemática está en la exportación de las drogas, y no tanto las que quedan dentro. Obvio, que hay consumo interior, pero el negocio certero está en EE. UU. y el resto del mundo.
Para colmo, se destapa la olla de su negocio con Vitalogic, una empresa en la que está implicada una coima a un tal Jorge Hernán Alarcón Ayala, quien fue escogido como contratista en el año 2016 para establecer contratos, y en el cual su hijo también fue beneficiario, o está implicado. Eso lo dicen las noticias. Eso lo dice Elmer Montaña y Daniel Coronell, y hablan sobre un archivo de 50 páginas, que tiene en juicio, en audiencia preparatoria, al ingeniero Rodolfo Hernández. La prueba que tiene la fiscalía es suficiente para que le dicten sentencia condenatoria.
Sería histórico en este país que elijan a alguien que está acusado por corrupción. “Para la Fiscalía existen pruebas graves, con alta probabilidad de verdad la responsabilidad de Rodolfo Hernández, en el delito de Interés indebido en celebración de contrato, un delito contra la administración pública. El código penal establece una pena entre 5 años y 4 meses, hasta 20 años de cárcel”, testifica Coronell. Hay como 7 personas implicada a las que están en indagatoria.
La jugada, según dice Montaña, es que Rodolfo Hernández, siendo ya presidente, no tendría a un fiscal llevando el proceso judicial, sino que sería el congreso mismo, el cual deberá enmermelar para que salga impune, libre y sin proceso alguno. La misma estrategia que han utilizado en el pasado otros políticos que le han hecho demasiado daño al país. O puede que la Corte Suprema lo pase a investigar, y a la final, ni pueda ejercer su mandato presidencial.
Por si fuera poco, no se sabe aún lo de la supuesta muerte de la hija, y del anunciado secuestro. Con show de lágrimas en RCN y todo. No se sabe si era hija adoptiva, porque después dice que sólo fueron dos hijos adoptivos, y los otros naturales, y se rumora que ella, tal vez, aún siga con vida, ya que la cédula está activa y supuestamente tiene movimientos financieros y de propiedades a su nombre. No se sabe tampoco si fue el EPL, el ELN, o, a veces dice que fueron bandas de criminales. No hay claridad. Hay muchos rumores.
Memes, videos, montajes chistosos, frases y demás revolotean sin cesar. Uno de los más sonados, es cuando sale llorando, diciendo que lo que quiere es la paz, en un bochornoso y patético video, que hace pensar en los asesores de campaña diciéndole cómo debe llorar, y en qué momento pronunciar las palabras. Lo compararon con Abraham Simpson cuando finge que llora. Los Simpson la han sacado del estadio. O mejor, lo que editan el contenido.
Editan al viejito endeble y lo sustituyen por la escuálida figura del señor Burns al lado de dos mujeres al lado de una piscina. Además, asombrosamente en alguna entrevista aparece la mamá de Rodolfo, de la misma forma que asombró a todos los televidentes saber de la existencia de la mamá del señor Burns. Épico capítulo. Por último, sale una parodia del capítulo de Bart, el niño Yonofui, que magistralmente hace descargar de la risa.
Mágicamente y gracias a los cielos, Rodolfo se ha convertido en lo que es, un meme. Un meme como tantos que ya han surgido, y lo que se concluye es que, de quedar como presidente, los ciudadanos tendrán cuatro años de sólo memes. Puede que dé risa, pero la política es algo serio. La política se mete con todos y no deja nada a los que no entran dentro de la dinámica del poder. Los internautas gozarán y desde luego que olvidarán uno a uno los memes que día a día irán saliendo. Todo será de nuevo un circo y una payasada. Así como ha venido sucediendo los últimos cuatro años. O bueno, los últimos 20, 30 o 40 años.
Un aborrecible espectáculo de la ignominia, de la burla, de la masacre, de la muerte, del falso positivo, de la detención arbitraria, de la injusticia, de la impunidad y del ridículo que han hecho “nuestros” mandatarios en sus estúpidas intervenciones. Sin olvidar que, desde luego, el uribismo ya está de su lado del tablero. Las fichas ya están colocadas. Las torres, los caballos, los afiles, y hasta aviones y bombarderos, porque la guerra es sucia. Cabal, Paloma y Fico, fueron los primeros en saltar. Los demás vienen a respaldar después. El registrador advierte que se deben aceptar los resultados. No hay veeduría internacional, y no se ha gestionado tampoco.
Las encuestas varían. Invamer dice que está reñido, casi por un punto de diferencia, mientras otra, la de YanHasse, dice que Petro le va ganando entre un 45% y un 35%. Caracol, desde luego, sólo saca la de Invamer, y sólo toma la muestra de 2000 encuestados. Ridícula cifra.
Sale lo de los Petrovideos, pero parece no calar mucho, a pesar de los esfuerzos de Vicky por generar un gran escándalo mediático, llamándolos PetroGate (no deja de generar risa la manera seria que bautiza esta gran chiva informativa). Se denuncia entonces la “campaña sucia” que utilizan algunos colaboradores de la campaña. Pero pues se supone que, dentro de la guerra política, es algo normal. Así mismo, en ese tal escándalo que se revela, impresiona que, con la invitación de Pacho Santos al programa, no puede evitar repetir desesperadamente y casi rogando a los colombianos que no voten en blanco, porque un voto en blanco es un voto por Petro.
Por su parte, desconcierta la vomitiva forma de hacer periodismo parcializado de una periodista de Semana, una tal Nieto, que realiza unos patéticos comentarios carentes de objetividad y profesionalismo, cada vez que se pasa alguno de los videos.
Un aliciente es que la desfavorabilidad de Rodolfo le subió, de un 14%, a un 34%, eso es mucho. El mismo Néstor Morales, cuñado del presidente, cuenta en Caracol que si a Petro no lo tocó lo de las bolsas de dinero, no lo va a tocar lo de los Petrovideos.
Más allá de la misoginia, la impertinente manera de hablar, vulgar, grosero, como un jerarca que está acostumbrado a mandar gritando, a amenazar con darle un tiro a alguien, a cachetear a cualquiera, a limpiarse el culo con la ley, a amenazar con echar a sus propias funcionarias por no hacerle caso, tratarlas de hps y a demostrar que no le importa la ilegalidad, lo que preocupa es el hecho de que los colombianos encontremos en él un dirigente. Ya estamos tan mal acostumbrados a los presidentes anteriores, que este engendro más no nos parece tan grotesco, cuando realmente se hace tan evidente y visible.
Qué vergüenza se siente el ver cómo se defiende con un discurso tan endeble como su semblante, donde habla de defender a los colombianos mientras está escondido en Miami, empotrado entre un par de agentes gringos, a los que les hace pleitesía por la supuesta seguridad brindada. Está por allá en Miami, porque supuestamente lo piensan asesinar, pero “esa matada” es a cuchillo. Y cuando le preguntan de las pruebas sobre esto, dice que son los organicismos de seguridad los que se encargan de eso. Pero no hay nada. No hay ninguna prueba, y dice que desde hace rato lo quieren matar, desde que era alcalde. Le da miedo salir a un debate. Seguramente Petro lo fulminaría con su palabra.
Qué asco da saber que se defiende con un papelito donde no hay nada laudablemente escrito. Un discursito simplón y vacío que no tiene mayor preparación. Rodeado de cámaras y periodistas, porque ni siquiera hay gente que lo esté apoyando o respaldando. Dice que tiene que seguir vivo, porque él, supuestamente tiene la tarea de protegernos, para dar la lucha que necesita Colombia. Porque él va a proteger a Colombia de las bandas criminales.
Nos va a proteger de Petro y de sus medidas que generarán más desempleo y que hará peligrar las pensiones. Nos va a proteger de convertirnos en Venezuela. ¿En serio? ¿Otra vez? ¿A lo bien? Nos va a proteger ese cucho que no sabe nada. Ni de ley, porque se limpia el culo con ella, ni de política, ni de nada. Ah, pero tranquilos, que él va a pedir ayuda a los que saben. Hasta confesó en Soho que posiblemente Vargas Lleras sería el ministro de Defensa.
Con un repetido “no los voy a defraudar” termina su exánime discursillo. Recalcando con énfasis un argumento tan infantil, pidiendo que lo miren a los ojos, como si fuera una promesa de un niño de primaria. Tal vez escondiendo su propio miedo, de que realmente sabe que sí va a defraudar a Colombia, que sí los colombianos nos desilusionaremos de nuevo.
Obviamente, no es que uno sea un espartano, un legionario, un mongol o algo así, para que prefiera que su dirigente sea el más impetuoso en batalla, el más fuerte o valeroso ni mucho menos, pero es que ni siquiera genera admiración, honorabilidad, valentía, convicción. Nada de eso. Realmente daría vergüenza tener un presidente así. Su insuficiente virilidad la disimula bajo su señalamiento constante de su índice derecho y sus ínfulas de machista mandón, arrecho y gritón.
Como ñapa, Wilson Arias afirma que HG Constructores tiene un homónimo que funciona como off shore, o parafiscal en Miami, y allí es donde evade impuestos y lava dinero.
Apelo a la sensatez de Colombia. Imposible que la gente siga creyendo en pelafustanes que pueden decir cualquier cosa, cualquier charada y cualquier grosería y que se va a queda la cosa así no más. Imposible que la gente legitime el asco, el machismo, la debilidad.
Parece que el cuchito se está quemando solo. Hasta el más uribista pensará que no, que tampoco. Que no aguanta. Que así, se diga que Gustavo es un guerrillero (aunque no se entienda la diferencia del M con las demás guerrillas; que no se entienda muy bien quién fue el M y qué fue lo que hizo, y qué hizo Petro mientras estuvo en el M), es preferible, que ese cuchito de populismo ramplón que cita a Jack Nicholson, en vez de citar a los filósofos alemanes, como lo hace el otro.
Creo que más allá de votar por Petro, es no votar por un cucho que nada de nada. Supondría que ninguna mujer, con sentido común, o sentido libertario vaya a votar por él. Si las madres y padres son algo sensatos, desde luego que prefieren la educación como precepto fundamental en la vida de sus hijos, y desde luego que Rodolfo no convence con eso. De hecho, él mismo afirma que ha sido siempre un mal estudiante. Y dice que manejar una alcaldía es igual que gobernar un país.
Imposible que la gente lo elija. Sería una deshonra, que después de la desahuciada imagen que da Duque en el exterior, y que uno siente en el fondo, como que qué boleta que ese sea el presidente de Colombia, ahora va a ser ese cuchito que, si corre, tal vez se parte en pedacitos. Imposible. Imposible que Colombia se deje meter ese paquete chileno. O bueno, colombiano. Imposible, que después de ver la comparación de las notas periodísticas que hicieron Los Informantes el domingo no hagan mella en los ciudadanos del país.
¿O será mejor elegir al preparado, el pilo, el que le ha entregado su vida a la política, más no a la gerencia y al negocio? ¿Será mejor elegir a una persona con valores loables de justicia y reparación? ¿Cómo no confiar en un revolucionario? ¿No son acaso las revoluciones lo que han hecho de la Historia, la Historia? Hay honor, hay sueño, hay anhelo. Sabe. Es un capo académico. No se puede negar. Se sabe el país. Solo que la gente lo crucificó por el hecho de haber pertenecido al M. Lo pintan como un hampón, cuando su máximo deseo es ser más inteligente. Salió del mismo colegio de Gabo. Y cuando chiquito leía El Quijote, pero también a Rousseau, y confiesa que es una mezcla explosiva y peligrosa pues eso lo volvió revolucionario.
Al menos dijo que Robin Hood era su héroe, cuando al cuchito se le olvidó la respuesta, después de haberla repetido y preparado varias veces. De hecho, sería la antítesis, pues afirma robarles a los pobres con sus hipotecas.
No es lo mismo pasar una pena ajena mientras uno ve un video del cuchito, a escuchar a Francia en plena Plaza de Bolívar, que hace llorar y derramar lágrimas. Es como un sismo interno, que te conmueve totalmente. Es la representación de la berraquera, la pasión de las bases, de la vida misma en peligro de muerte, del se puede, del campo, del sancocho, de la justicia y la dignidad, del vivir sabroso.
No sé a quién realmente lleguen estas palabras. Pero ojalá, muy allá en el fondo de su corazón, en su sensatez, así no haya tenido la posibilidad de estudiar mucho, al menos se puede recurrir al sentido común, y el mismo sentido común dicta que uno no debe ser tan absurdo en las decisiones.
Imposible que no se dé cuenta que, si coloca en una balanza la preparación de cada uno de los dos candidatos, el peso de la inteligencia, de la intelectualidad, de la academia, y una vida entera dedicada a denunciar lo que no está bien, de denunciar la infamia y la deshonra que ha atrapado a este país desde hace varias décadas en el narcotráfico, la corrupción administrativa y el paramilitarismo, pese menos que las ínfulas de un vejete que quiere jugar a ser presidente. Que promete y no cumple, como los veinte mil lotes con servicios, que nunca entregó. Que ha volteado tierras, como lo hicieron los delfincitos del Innombrable.
Un cuchete desconectado de la realidad. Le preguntan sobre su parecido con Donald Trump, y habla es de su peluquín, porque no recurre a dar alguna referencia política, pues contesta que no sabe, que no podría decir nada, porque no le puso atención, en cuatro años, al gobierno de Trump. ¿Un mandatario que no sabe de política?, ¿qué no se interesa ni siquiera por pasión a la política?, ¿ni por curiosidad histórica?
Se demuestra entonces que es un capricho. Que poco le importa. Que quiere jugar a las cartas. Apostar. Nada tiene que perder antes de que se vaya de este plano material, de que llegue la pelona a llevárselo (que pareciera que es pronto). Si pierde las elecciones, dice, se va a Brasil, “y a la izquierda”, se va a un safari en el África. Como si África estuviera tan cerca, y a “la izquierda” de Brasil.
Basta ya de fanatismos. Basta ya de seguir enceguecidos. Basta ya de los discursos y la política tiktokera, chismosera y susurrada. Es momento de hacer parte de la política real. Participar. Para que no sigan otros cuatro años de arrepentimientos, y de decir ¿sí ve?, yo le dije.
A pesar que las últimas votaciones, sobre el plebiscito por la paz, la consulta popular anticorrupción, Duque, hayan decepcionado enormemente a los sufragantes, sería una ironía que otra vez Colombia reciba un golpe como estos. Así sea uribismo o izquierda, el país no merece un presidente como Rodolfo.
Spider J.