El lingüista Noam Chomsky dijo en 2020 que Donald Trump era el ”peor criminal de la historia” por sus posiciones belicistas, sin embargo, hace dos semanas señaló en una entrevista con un periódico holandés que Trump era el “estadista de Occidente” que propone una solución al conflicto de Ucrania.
No hay duda de que Chomsky es una de las mentes vivas más prodigiosas, la visión que ofrece del mundo no solo es amplia sino también exquisita.
La enseñanza que nos deja es trascendental, la valoración de los líderes debe hacerse por su ideario y su proceder; desafortunadamente, en nuestro medio impera el caudillismo; esa visión reduccionista de la política que les han ofrecido, hace pensar que ciertos políticos son dueños de los derechos, las libertades y de todo bien supremo; algunos incluso pretenden ejercer una suerte de monopolio sobre la moral y todo aquello que esté por fuera de sus movimientos políticos es censurado e incluso considerado pérfido.
Hemos acostumbrado a los políticos a una adulación casi que azarosa, a veces parece que no solo somos adeptos a una posición ideológica sino que empezamos a profesar una especie de devoción por las personas que la representan.
A unos candidatos a la presidencia los cuestionan por feos a otros por viejos, a otras por ser mujeres, que otro tiene los ojos muy grandes dicen en el gracejo popular; por el contrario, damas dicen que se casarían con su candidato. Debe ser mayúsculo el proceso devocional que los lleva incluso a desentrañar la belleza de sus próceres; pues revisando el tarjeton no alcancé a visualizar ningún adonis, solo hombres y mujeres de carne y hueso que ejercen la política, no hay seres supraterrenales que ameriten culto.
Desafortunadamente se nos ha olvidado un elemental detalle y es discutir sobre sus proyectos y propuestas. Poco nos interesa conocer sobre temas presupuestales, desarrollo sostenible y sustentable son ítems de poca trascendencia para nuestro pulcro intelecto.
Según cifras de la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito, Tumaco es el municipio con más cultivos de coca en el país, sencillamente somos el primer productor de droga del mundo; qué bueno que nos den un brochazo sobre las alternativas efectivas que ofrecen para solucionar ese pequeño problema; incluso de acuerdo al portal insight crime hemos convertido al Ecuador en una “autopista de la cocaina” somos un problema para el vecindario pero nos entretiene más la discusión insulsa sobre el físico de nuestros candidatos.
Todos los candidatos tendrán sus méritos y sus yerros, pues hay que reiterar que son seres terrenales, lo importante es que la decisión de apoyar a uno u otro surja del análisis sensato y sobre todo de la hondura de tu convicción patriótica; las ideas, los derechos, las libertades y nuestra bandera son permanentes, nosotros somos transitorios. Chomsky, a sus 93 años, no deja de ser el mejor maestro y estratega.