En las próximas horas, Egan Arley Bernal viaja al principado de Mónaco a empezar su preparación definitiva para regresar a competir. Según el neurocirujano Gustavo Ariza, quien lo trató después del 26 de enero, fecha en la que chocó contra un bus intermunicipal fracturándose 19 huesos, Egan está listo para ponerse un número de competencia el 24 de mayo. Esta información contrasta con los primeros diagnósticos médicos que afirman que después de un golpe tan terrible el campeón del Tour de Francia 2019 jamás volvería a subirse a una bicicleta.
Sin embargo, Egan, cuyo poder de recuperación lo hizo ganarse entre la comunidad médica el apodo de Wolverine, ya está completamente sano en apenas tres meses. El artífice de esta gesta, además del biotipo del líder del INEOS, es el médico Gustavo Ariza que le realizó la operación de columna que le hicieron al ciclista en la Universidad de La Sabana. El tratamiento y la terapia sirvieron para conseguir saltar todas las fechas de recuperación y podría incluso en septiembre poder competir la Vuelta a España, la primera grande desde que se accidentó.
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