Daniel Quintero le tiró el último salvavidas a su gran amigo, Juan David Duque, después de que Petro le quedara mal y no lo incluyera en la lista a la Cámara por Bogotá del Pacto Histórico, como acordaron después de que Duque se encargara de alquilar, con recursos propios, la casa Petro en Bogotá. Desde el inicio fue crónica de una muerte anunciada, Petro no se apareció en la inauguración de su primer sede en la capital, pero Juan David Duque anunció esa misma noche su candidatura a la Cámara por el Pacto.
El día de inscribir la listas llegó y Petro no incluyó a Juan David Duque que quedó encartado con la Casa Petro que terminó cerrando. Como premio de consolación, el alcalde de Medellín nombró a su amigo secretaria privado después de la cucuteña María Camila Villamizar, quien se venía desempeñando en el cargo desde el año pasado, pasó a ser secretaria de Gobierno tras la salida de Esteban Restrepo.
Juan David Duque conoció a Quintero en la Universidad del Rosario, a pesar de la diferencia de edad que es de 10 años -Duque tiene 29 años y Quintero 41 años- se convirtieron en uña y mugre. Quintero aprovechó su paso en el viceministerio de las TIC (2015-2017) para recomendar a Duque quien entró al Área de Emprendimiento e Innovación de iNNpulsa. Al tiempo tomaron la decisión de meterse a la política, Quintero se jugó por la alcaldía de Medellín y Duque por la cámara de Representante por Bogotá en la que se quemó. A pesar de que se quedó sin la posibilidad de volverse a lanzar, ahora le hablará al oído al alcalde Quintero.
Le podría interesar:
Rodolfo Hernández se quiere quedar con la Casa de Petro en Bogotá