En lo que equivocadamente los medios de información han titulado como la guerra entre Rusia y Ucrania, algunos pensamos que eso no es una guerra porque no hay igualdad de condiciones.
El problema es económico. En este gasto innecesario del dinero que al final es el ganador, el papel moneda sirve para producir armas y municiones; para transportar ejércitos se necesita dinero.
Para que todo sobre la tierra se mueva y algunos se diviertan viendo la humanidad convertida en piltrafa humana, se necesita mucho dinero; para algunos pastores no es mas que el demonio o satanás, que se apodero de todo y de todos sobre este planeta.
Comparo de la misma forma, a Colombia en donde los grupos al margen de la ley, y la discusión de unos acuerdos que dicen pararon la guerra y trajeron la paz a los colombianos, ha sido una gran mentira porque dinero se necesita por toneladas y legalmente no existe.
En esa guerra colombiana aun sucede lo mismo que esta pasando con Rusia y Ucrania. Las armas de muchos locos sin sentimientos que ingresan a los territorios, destierran a las personas desarmadas que huyen para salvar sus vidas. Y como sucede en Venezuela el hambre también produce migrantes como en Cuba y Nicaragua.
Ahora Estados Unidos busca perdonar la atrocidad de los sucesos en Venezuela y busca la paz y la amistad con quienes dirigen el narcotráfico según las investigaciones.
Aunque estas malas personas, amparan al delincuente, y aunque este se agazapa en montes venezolanos en donde se utilizan trincheras a muchos que vienen a Colombia a matar, y regresan protegidos al parecer por Maduro, los gringos buscan hablar.
No es entendible pero el problema es que para parar las acciones de los poquitos locos y desquiciados de Rusia, que procuran el destierro de gente que también habla ruso pero huye para salvar sus vidas, le frenan hasta la venta de gas y petróleo y por lógica Estados Unidos debe comprar petróleo a Venezuela que es uno de los aliados más importantes en la región latinoamericana de Putin.
Seguramente el futuro es que al comprar petróleo venezolano que no tienen, se les entregan dólares que al final le pueden servir a Putin porque Venezuela también tiene negocios con ese país.
Lo cierto de todo, es que el Dios dinero viaja y traspasa fronteras sin visas, ni pasaportes, ni protecciones, ni vigilantes, porque al final son billetes y nada más que se llaman Rubros, dólares, pesos colombianos, marcos o libras esterlinas, que solo producen daño a toda la humanidad que paga para sobrevivir y moverse.
Esto nos indica que ese Dios dinero, es el que ha entregado a muchos locos el poder y las leyes para que apliquen la pena de muerte sin juzgar a nadie.
Al final ninguno de esos locos, se ha puesto a pensar, qué pasaría si espichan el botón rojo y disparan una bomba nuclear que aniquilaría del todo al Dios dinero, que sirve a los mandatarios chiflados, que no han sabido como se debe vivir para evitar lo que nuestros ojos ven todos los días con el desfile de desplazados por todo el mundo; en donde unos y otros dueños de quienes manejan las armas miran a sus victimas que lloran y suplican, que las dejen vivir en paz, mientras ellos con espíritu hitleriano se burlan de otro Dios verdadero, que utiliza el amor y la humildad, y que para muchos es el dueño de todo.
Recuerdo la canción de Silva y Villalba ¿Por Dios, adónde estás?