Muchos periodistas consideraron un verdadero globo eso de que iban a fichar a Hernán Crespo, uno de los nuevos prospectos del fútbol argentino, uno de esos ex futbolistas que bebieron de los más grandes sabios del fútbol, Capello, Bielsa, Eriksson y que está implementando con éxito todo lo que aprendió en la cancha siendo entrenador. Ganarse la Copa Sudamericana con un equipo menor como Defensa y Justicia, habla de lo que está hecho un entrenador. Crespo sí recibió la oferta del club, que era buena, y hasta le gustó su proyecto deportivo, pero prefirió pasar ya que espera propuestas de clubes grande de la Argentina y Europa.
Es que el propio Antonio José Ardila, el ex embajador del país en Inglaterra, arribó a Medellín para apersonarse de la situación después de la renuncia de Alejandro Restrepo y del fracaso en la Copa Libertadores. Por eso están pensando en grande. El paso de Santiago Solari por el América de México no pudo ser más desafortunado, dejó al equipo en un histórico último lugar. Sin embargo es un tipo de peso. La propuesta de Nacional es sólida y Santiago Solari lo está pensando. En caso de aceptar será el técnico extranjero más influyente y de mayor renombre desde que Carlos Salvador Bilardo fue el entrenador del Cali en 1978 y de su maestro, Oswaldo Juan Zubeldía, quien dirigió Nacional por esos años.
Es un entrenador de recorrido, una autoridad en el Real Madrid, institución donde fue técnico y es una gran influencia. Un DT que puede ganar fácilmente 5 millones de dólares al año. Sobre él reposaría la confianza de Antonio José Ardila y de ascendentes ex jugadores que dan la vida por Nacional como Juan Pablo Ángel. El músculo de los Ardila ya empieza a funcionar y la hinchada podrá respirar tranquila: la dignidad del equipo pronto se va a reponer.