Mientras veo al mundo enternecido por la prueba de embarazo que se hicieron Camilo y Evaluna y que dio positivo, yo no puedo dejar de expresar mi preocupación. En un mundo donde el matoneo es una constante en todos los países del mundo, ¿es justo que alguien arranque su vida con el pie izquierdo?
Camilo Echeverry es una estrella en ascenso. No tenemos dudas de que pronto estará en las portadas más importantes del mundo. Hizo de su relación con Evaluna un verdadero fortín económico, desde su matrimonio hasta sus videos en casa, siempre bajo la tutela de su suegro Ricardo Montaner y desde la palabra de Dios, ya que ambos muchachos son bastante creyentes. Camilo es capaz de monetizar cualquier cosa que tenga que ver con la pareja, hace poco incluso publicó esta foto de Evaluna vomitando con las primeras náuseas.
No podían ponerle un nombre normal al bebé. No lo podían hacer. No podía llamarse Jairo, ni Juan, ni mucho menos José. No, tenía que tener un nombre diferente y ganador, como por ejemplo Indigo que se refiere porque Indigo es un sustantivo masculino que puede usarse también como adjetivo que hace referencia a un color también denominado añil. Según el periódico El Colombiano, “El color índigo es un azul oscuro, con visos cobrizos, que se obtiene de los tallos y las hojas del añil (un arbusto perenne). Además, se sabe que viene del latín Indĭcum, que significa “de la India”.
Así que con este nombre raro también serán tendencia. Camilo y Evaluna están demostrando cómo es que se hace negocio con el nombre de los artistas. Y eso, en estos tiempos atribulados, puede ser de las cosas más importantes