Aunque usted no lo crea, mujeres que pasan de los 60 años, con su cuerpo lleno de arrugas y su piel cuarteada, hoy venden su cuerpo, ocultando sus canas y ofreciendo picantes combos sexuales.
En el centro de Bogotá se mueven varios negocios en las calles, entre esos, el de la prostitución. Hablamos con una de estas mujeres que forman parte de la tercera edad para que nos retrate la situación que viven al tener que vender su cuerpo para poder salir adelante, algo que nadie desearía para sus abuelas.