Freddy Guarín estaba loco por retirarse en Colombia. Es que salió muy joven del país, a los 16 años, cuando lo compró Boca Juniors. A los 18 estaba en Europa y supo destilar su grandeza en clubes como el Porto o el Inter de Milán. A los 30 años se fue a China a ganarse un camionado de plata.
Sin embargo, a los 35, estaba cansado de vivir fuera del país y quiso regresar. El último semestre en China no fue el mejor, incluso no estuvo jugando por lo que llegó al país gordo. Tenía toda la intención de dar lo mejor hasta el punto de que bajó ostensiblemente su sueldo para aceptar la oferta de Millonarios. Fredy Guarín decidió ganarse un salario mensual de 120 millones de pesos, y ni siquiera así era la figura que más ganaba sueldo en Millonarios.
Pero solo duró un semestre la ilusión. Primero fue su evidente problema de sobrepeso el que le impidió brillar, después fue su problema familiar ocurrido en casa de sus padres el jueves santo del 2021. A partir de allí Freddy se convirtió sólo en un fantasma y en casi un exjugador. Con su novia paseaba feliz por redes sociales y estaba dedicado a otro tipo de negocios. Ahora Millonarios acaba de bajarle el pulgar. ¿Terminará la carrera de uno de los más grandes de nuestros futbolistas?