Luis Díaz se ha convertido en la sensación del fútbol colombiano tras su impresionante debut en la Copa América. El joven Wayuu oriundo de Barrancas, Guajira creció en el seno de una familia pobre, fue el Pibe Valderrama el responsable de descubrirlo mientras jugaba en una cancha de barro con un balón de trapo. Luis estaba desnutrido y cuando se lo llevaron a Barranquilla Fútbol Club obligaron a engordar 10 kilos para ingresar al Junir en el 2016. Ante la adversidad, conoció hace más de 7 años cuando solo tenía 15 a quien sería la mujer que nunca lo desampararía ni en la pobreza ni en la riqueza.
Geraldine Ponce ha sido la novia del jugador desde que era un rostro desconocido para el país. Un 26 de abril decidieron iniciar su relación que no fue fácil, él se esforzaba para entrenar y mantener el ritmo en su intento por sobresalir frente a sus compañeros. Ella creía en él cuando nadie lo hizo y le preparaba las comidas que necesitaba para que se llevará a sus entrenos. Geral, como la llama cariñosamente Luis, nunca se quejó de que vivieran en una pieza diminuta en una pensión en un barrio humilde de la capital del Atlántico. Aunque los jugadores cuando alcanzan la fama suelen dejar a sus parejas como sucedió con James Rodríguez y Daniela Ospina, el caso de Luis Díaz y Geraldine Ponce fue diferente. Una vez el guajiro entró en el Porto, Luis se mantuvo fuerte al lado de su novia de la adolescencia a quien convertiría en su esposa. Hoy, esperan un bebe y se mantienen más unidos que nunca frente a un prometedor futuro.
Le podría interesar:
Luis Diaz, el niño Wayuu desnutrido que se convirtió en el crack de la selección