La abogada Ana Bejarano lideró la iniciativa de resguardar a periodistas colombianos del acoso jurídico por medio de una demanda que pedía hacer inexequible la ley de prensa (Ley 29 de 1994) que responsabilizaba a periodistas de dañar a terceros por medio de sus publicaciones y los obligaba a pagar elevadas indemnizaciones. Tras la lucha de Bejarano de la mano de la Fundación para la Libertad de Prensa, la Corte Constitucional tumbó la ley.
Bejarano quien ha hecho escuela junto a su papa el prestigioso penalista Ramiro Bejarano, se la juega también defendiendo a Catalina Ruiz-Navarro, María de los Milagros Londoño y las 8 mujeres anónimas que denunciaron a Ciro Guerra por acoso y abuso sexual. Sin embargo, a la firma de abogados Triana, Uribe & Michelsen que representa al cineasta se le han complicado las cosas pues en los últimos días demandaron a las periodistas por un millón de dólares al haber dañado el buen nombre de Ciro Guerra.
Con el triunfo de Bejarano, la exigencia de indemnización de Ciro Guerra penda de un hilo. A esto se le suma, otro testimonio que las periodistas añadieron a su investigación inicial. Ahora son 9 mujeres las presuntas víctimas del cineasta.
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