Desde que Nairo Quintana se fue de Movistar, a finales del 2019, el equipo quedó huérfano de grandes gestas. Alejandro Valverde con 41 años recién cumplido ya está en franco declive y Enric Mas y Marc Soler han demostrado hasta la saciedad no estar a la talla. Es tan crítico lo que está pasando que Movistar que de no conseguir próximamente resultados el equipo dejaría de ser parte de la élite del ciclismo mundial. La manera en la que se fue Nairo no fue la mejor. En el documental estrenado pro Netflix se notaba claramente el mal trato que recibió el ciclista apesar de ser el único de la plantilla en lograr podios en las tres vueltas grandes y ganar un Giro, una vuelta y más de treinta etapas.
Paradójicamente, a pesar del evidente escozor que les provocaba que el líder del equipo fuera un colombiano, tuvieron que contratar a otro boyacense, Miguel Ángel López quien, de paso, es la última esperanza de Movistar para recuperar el prestigio perdido. López sufrió un terrible accidente en la primera etapa del Giro a comienzos de octubre y, después de su operación, tuvo que esperar que la herida cicatrizara.
Superman López debutará en el Tour de Romandía y tiene ganas de desquite después de una última temporada en el Astana en donde evidentemente no logró los objetivos. Luego de una pésima cronoescalada perdió la oportunidad de ser podio en el Tour de Francia que terminó en la sexta posición. A los 27 años Miguel Ángel tiene la juventud, la fuerza y el equipo para disputar lo que quiera. Ahora empezará a ganar kilometraje y espera ya ponerse a punto para las grandes carreras del año.