Interrogada durante una conferencia de prensa sobre el posible cierre de la prisión de Guantánamo durante el mandato de Biden, la portavoz de la Casa Blanca, Jen Psaki, dijo: "Este es ciertamente nuestro objetivo y nuestra intención". Agregando: "Hemos iniciado un proceso en el Consejo de Seguridad Nacional (...) para trabajar con los distintos organismos federales y evaluar la situación actual (...), que hemos heredado del gobierno anterior".
El centro de detención fue construido rápidamente en una base naval estadounidense en el extremo oriental de la isla de Cuba bajo la presidencia de George W. Bush. Está situada en un enclave de 117 km2 cedido por Cuba a Estados Unidos en 1903, como agradecimiento por su ayuda en la guerra contra los españoles.
Los primeros veinte prisioneros llegaron el 11 de enero de 2002, tras los ataques del 11 de septiembre de 2001, actualmente la cárcel de Guantánamo alberga aún a unos 40 detenidos, 26 de los cuales son considerados demasiado peligrosos para ser liberados, pero no han sido sometidos a procesos judiciales.
Guantánamo se ha convertido en el símbolo por excelencia de los excesos en la lucha contra el terrorismo de Estados Unidos.