Con angustia fue despedido el año 2020, que dejará una profunda huella, pues los graves daños causados por la pandemia –sin contar las miles de personas que lloran la muerte de sus familiares– han terminado de desenmascarar la odiosa desigualdad que existe en Colombia, entre unos pocos que amasan inmensas fortunas y millones de personas que consumen una comida diaria o a lo sumo dos. La pandemia desnudó que los neoliberales no distribuyen de la mejor manera la riqueza, sino que la concentran en las multinacionales y el capital financiero transnacional, dueños de casi todas las empresas, especialmente las de servicios públicos esenciales y fundamentales. Ese modelo neoliberal, que “nos lo vendieron” como la solución para la distribución de la riqueza y el combate a la corrupción, después de 30 años, ubicaba a Colombia a finales del 2018, según el Banco Mundial, como el cuarto país más desigual del mundo, detrás de Sudáfrica, Haití y Honduras.
Wikipedia publica una lista de países por igualdad de ingreso, basada en el coeficiente de Gini de 2017, que representa el nivel de distribución de ingresos, donde el 0 significa que los ingresos y el consumo están distribuidos equitativamente entre toda la población (sociedad igualitaria), mientras que el 1 representaría una situación hipotética en la cual solo una persona posee toda la riqueza (sociedad inicua). De acuerdo con Naciones Unidas, un coeficiente de Gini superior a 0,40 es alarmante, ya que esto indica una polarización entre ricos y pobres. Se estima que la desigualdad mundial es de 0,63, donde “la renta del 20 % de las personas más ricas del mundo es 28,7 veces más elevada que la del 20 % más pobre”. Esta lista de 159 países indica que los más igualitarios son Islandia, Eslovaquia, Eslovenia, Noruega, Ucrania, República Checa, Finlandia, Bélgica, Moldavia y Kirguinstán, con un coeficiente de Gini que oscila entre 0,246 y 0,268. El mejor de América es Cuba, en el puesto 86, con 0,383, seguido por Venezuela (91) con 0,390, Uruguay (85) con 0,380 y EE. UU. (109) con 0,419. Colombia aparece en el puesto 147 con 0,508, y en América solo le gana a Brasil (148) con 0,513 y Puerto Rico (151) con 0,537. El más desigual del mundo es Surinam, con 0,613. Según datos oficiales, el coeficiente de Gini para Colombia desmejoró, o sea aumentó la desigualdad, al pasar a 0,517 en 2018 y 0,526 en 2019.
Abundan los ejemplos de medidas tomadas por el gobierno nacional que han profundizado en estos 30 años la brecha entre los poderosos y la población colombiana: venta del patrimonio, liquidación de empresas estatales, privatización de los derechos fundamentales y esenciales, regresivas reformas tributarias, garantías y tratados de protección que exacerban las ganancias del capital foráneo y la firma de los tratados de libre comercio que arrasaron con el aparato productivo nacional, generando desempleo estructural e informalidad, entre otras. Estas medidas tienen fundamento en la propia Constitución Política Nacional y las consecuentes leyes que la desarrollan, como la que establece que el salario de los congresistas aumente un 5,12 %, mientras que el salario mínimo y el de los pensionados que devengan menos de dos salarios mínimos aumenten solo el 3.5 %, y a los pensionados que ganan más de dos salarios mínimos, cerca del 1.5 %, o sea, la inflación del año 2020. Esta es la Colombia de los neoliberales. ¡Bienvenido 2021!
