El nombre de Alberto González Mebarak es famosos en los corredores de la Facultad de Derecho de la Universidad de Pamplona, a las afueras de Bucaramanga, Santander. Todos los estudiantes y egresados de dicha carrera en dicha institución saben muy bien quién es él. Y, de boca de quienes recibieron su cátedra, llevarle la contraria a sus argumentos en un contexto litigante puede ser un acto cercano al masoquismo pues, según dicen, la contundencia siempre está amarrada a las palabras que salen de su boca.
Sus clases son tan tensas como emocionantes. Entran muchos y salen pocos. Es irreductible con los detalles, impecable en las intervenciones, implacable con las valoraciones y no se le escapa nada. Tampoco perdona los más obvios errores que se puedan cometer por parte de sus pupilos. Entre amado, odiado y temido, ninguno, absolutamente ninguno de sus estudiantes, se ha atrevido a cuestionar los méritos académicos que lo ponen en el aula de clase y que hoy le dan renombre en todo el territorio nacional por encarnar un enfrentamiento legal directo contra el Ministerio de Salud y el presidente Duque.
En Bucaramanga el coronavirus ha pegado en un pico tardío, después de varios meses de relativa calma. Más de 2 mil santandereanos han muerto a causa de la pandemia. El abogado González se ha mostrado firme frente a la amenaza del aumento del COVID y por esta razón decidió actuar con una tutela para detener al menos la llegada de contagios del exterior.
El jurista se paró firme en su postura de que el Ministerio de Salud debe velar por la protección y no propagación del coronavirus, especialmente en quienes son asintomáticos.
"La principal motivación es la protección a la vida y salud de todos los habitantes del país, dado que con la exigencia de la prueba PCR lo que buscamos es mitigar el contagio del COVID-19 y que se detecten los pacientes asintomáticos que vienen de vuelos internacionales", dijo González Mebarack en una entrevista con Caracol Radio.
Su recurso jurídico caló. El Juzgado 11 Administrativo del circuito de Bogotá le diera la razón para reactivar las pruebas de Covid-19 para los viajeros. Las consecuencias de la medida sería el freno de la llegada de miles de viajeros para las vacaciones del fin de año y un totazo adicional para las aerolíneas. Estas son las aerolíneas y sus respectivos vuelos afectados por la medida en cuestión:
Aeroméxico: Vuelos diarios desde Ciudad de México a Bogotá en un Boeing 787-900 con capacidad de hasta 270 pasajeros.
Jet Blue: Vuelos diarios desde Fort Lauderdale a Bogotá en Airbus A320 con capacidad de hasta 150 personas.
Latam: Con vuelos a Lima, Sao Paulo, Santiago de Chile y Miami desde Bogotá.
Wingo: Con vuelos desde y hacia La Habana, Curazao, Aruba, Ciudad de Panamá, San José en Costa Rica.
Lufthansa: Vuelo diario entre Frankfurt y Bogotá.
Avianca: Con vuelos a Nueva York, Washington, Punta Cana, Cancún, Ciudad de México, Los Ángeles, Ciudad de Panamá, Madrid, Barcelona, Londres, Quito, Guayaquil, Ciudad de Guatemala, Santo Domingo, Orlando, Rio de Janeiro, Buenos Aires, Santiago de Chile, La Paz, San Salvador
Air Europa: Con vuelos diarios desde Madrid a Bogotá, Cali y Medellín.
Delta: Vuelos directos diarios desde Atlanta a Bogotá.
American Airlines: Vuelos directos diarios desde Miami a Bogotá, Medellín y Barranquilla. También opera vuelo directo de Dallas a Bogotá.
Copa Airlines: Vuelos directos diarios desde Ciudad de Panamá a Bogotá, Barranquilla, Cali, Medellín y Cartagena.
United: Vuelos directos diarios desde Houston y Nueva York a Bogotá.
Turkish Airlines: Con sus 5 vuelos semanales directos desde Estambul, el destino más lejano de Colombia que está conectado con vuelo directo, el cual opera con un Boeing 777 con capacidad de hasta 300 pasajeros.
Air France: Aunque no ha reanudado completamente su frecuencia diaria desde Paris, Bogotá es uno de los destinos priorizados por sus aviones pos pandemia. A Colombia llega con un Boeing 787-1000, con capacidad de hasta 300 personas.
Spirit Airlines: La principal Low Cost gringa llega a Colombia con vuelos directos desde Fort Lauderdale y Orlando a ciudades como Bogotá, Cali, Barranquilla, Cartagena, Bucaramanga y Medellín.
El Ministro de salud Fernando Ruiz tiene sus propios argumentos desde el punto de vista epidemiológico que incluyen instructivos de la OMS para intentar frenar la decisión judicial, y no acatar la tutela y no comparte tampoco el requisito de la prueba PCR para vuelos internacionales.
Sin embargo, tras un pliego de preguntas enviado al Juzgado 11 Administrativo desde el despacho del MinSalud y un concepto emitido por la Asociación Colombiana de Infectología, el gobierno declaró que la medida quedaba por el momento eliminada, corriendo el Ministro el riesgo de terminar incluso con sanaciones judiciales hasta detención por desacatar el fallo.
El abogado Gonzalez contratacó y ante la negativa del gobierno por acatar las medidas falladas por el juzgado, interpuso un incidente de desacato contra el Ministro de Salud, Fernando Ruiz, quien en las últimas anunció que había pedido una aclaración en torno al fallo de tutela, advirtiendo además que la suspensión de la prueba, que se dispuso a principios de noviembre, se mantenía.
Gonzalez Mebarak, es fundador de su propia firma de asesorías legales que ha ganado mucho prestigio desde su creación en el 2013. Trabaja con un equipo compuesto casi que totalmente de mujeres que se especializan en acompañamiento legales en materia tributaria como impuestos territoriales tanto departamentales como municipales.
