Por más profundo que pueda llegar a ser el dolor y la rabia, siempre hay un espacio para el perdón, la reconciliación, para la solidaridad... para un abrazo. Así quedó demostrado tras el asesinato de Juliana Giraldo a manos de un soldado del Ejercito en una carretera del municipio de Miranda, Cauca.
Entre lágrimas, se abrazaron la hermana de Juliana Giraldo y la madre del soldado que le disparó.
Entre lágrimas, se abrazaron la hermana de Juliana Giraldo y la madre del soldado que le disparó https://t.co/u0nLaXQLCF pic.twitter.com/IQRRAtO6NB
— Sucesos Cauca (@sucesoscauca) September 25, 2020