Tomando lista:
-Lucía Ramírez Marta. ¡Presente!
-Iván Zuluaga Óscar. ¡Presente!
-Santos Francisco. ¡Presente presidente!
-Alfredo Ramos Luis. ¡Presente!
-Obdulio Gaviria José. ¡Presente Parcero!
-Holmes Trujillo Carlos. ¡Presente!
Están todos reunidos en Cúcuta, y el que toma lista es Álvaro Uribe Vélez, el barón, el pontífice máximo, el hombre de acero, el emperador, el duro de Medellín, el señor de las sombras, el del zurriago y los tres huevitos, el gran paracolombiano de los falsos positivos y las convivir; el de la voz recia en el micrófono, el que tiene a todos sus amigos presos en cárceles por vínculos con el paramilitarismo o el narcotráfico. Uribe el de las chuzadas del DAS, el caballo pura sangre, el del millón de sapos, el cínico, el “demente iluminado”, el de “si lo veo, le doy en la cara, marica”, el que extraditó a sus amigos para que no declararan en Colombia. El patriota que apoyó la guerra contra Irak, el número 82, el número uno, la ley 100, el inmaculado, el inspirador. ¡Álvaro Uribe presidente!
Están todos reunidos. Reunidos todos están. Y no les da vergüenza venir otra vez a Cúcuta a hablar mierda. A prometer el cielo a un infierno que ellos mismos crearon. Los hornos crematorios en Juan Frío, las masacres en Tibú, los descuartizamientos de campesinos acusados de colaboradores de la guerrilla, los muchachos sacrificados en Ocaña acusados falsamente de guerrilleros dados de baja en combate. Todo eso, señoras y señores, fue política de Estado. Álvaro Uribe no apretó el gatillo, pero fue el inspirador de estos grupos paramilitares que hoy se disputan con la guerrilla la zona del Catatumbo. Vienen ahora estos políticos a pescar en río revuelto. ¿Dónde estaba Marta Lucía Ramírez cuando fue ministra de Defesa? ¿Francisco Santos cuando fue Vicepresidente de la república? ¿Óscar Iván Zuluaga cuando fue ministro de Hacienda? ¿Luis Alfredo Ramos cuando fue presidente del Senado? ¿José Obdulio Gaviria cuando empollaba los huevitos de Uribe? ¿Carlos Holmes Trujillo cuando hablaba al oído del Supremo? ¿Dónde estaban estos últimos ocho años de uribismo puro y duro en que el Catatumbo necesitó de sus gestiones?
La sociedad entera de Norte de Santander debería declarar persona no grata a Álvaro Uribe Vélez por los siglos de los siglos, amén. Y a sus cipayos locales, del Centro Democrático, partirles los tres huevitos de Uribe en la cabeza para que cuando vuelvan a tomar lista tengan al menos la decencia de hacer primero la tarea.