La primera hipótesis apuntaba a que la muerte del italiano Mario Paciolla en Colombia había sido un suicidio. Sin embargo, su familia, amigos y la gente del Caquetá con la que Picolla investigaba los asesinatos a líderes sociales como integrante de la ONU, creen que hubo manos criminales detrás del homicidio. Desde el Parlamento Europeo, varios representantes han cuestionado al Alto Representante de la Unión para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, Josep Borell si está al tanto de la gravedad del caso y si le pedirá al gobierno Duque acciones urgentes para averiguar qué pasó con el voluntario.
Ha sido la Misión de la ONU en Colombia la encargada de recoger las pertenencias de Paciolla - sin compañía de la Fiscalía y envió un representante para que acompañara la autopsia, según la periodista Claudia Julieta Duque, quien fue cercana al voluntario. Desde Italia, los amigos de Mario Paciolla también están realizando una firmatón para que el ministro de Exteriores de Italia, Luigi Di Mario, para que investigue a fondo la muerte. De las 75.000 firmas han recaudado 60.297.
Al parecer, por información de Claudia J. Duque, la Fiscalía colombiana está a la espera de los resultados de las dos autopsias que ya se han realizado al voluntario, que había incluso acompañado la dejación de armas de las FARC en Colombia hace 3 años.
