Teniendo en cuenta la situación que vive el planeta originada por la pandemia del COVID-19, las playas han sido cerradas en Colombia. Por este motivo, la del Rodadero también (Decreto 153 del 1 de junio de 2020, artículo 35). Además, de acuerdo con el último dígito de la cédula, los ciudadanos de este sector de Santa Marta pueden salir únicamente un día a la semana, sin contar con que está completamente prohibida la actividad al aire libre los sábados, domingos y festivos (Decretos 157 del 5 de junio de 2020 y 200 del 9 de julio de 2020).
Del mismo modo, según los decretos ya citados, en la ciudad se permite el desarrollo de actividades físicas, de ejercicio al aire libre y de práctica deportiva de manera individual de personas que se encuentren en el rango de edad de 18 a 69 años, por un periodo máximo de dos horas diarias (Decreto 200 del 15 de julio art. 3, numeral 35). A la par, se establece que estas prácticas se autorizan de acuerdo con la medida de pico y cédula y asumiendo su autocuidad, al mantener el distanciamiento físico, el uso permanente y correcto del tapabocas, la limpieza de manos y respetando los protocolos de bioseguridad.
Con eso claro, las actividades físicas y de ejercicios al aire libre que se realicen de manera recreativa se harán individualmente, implementando la aplicación Coronaapp, únicamente en un radio de un kilometro del lugar de residencia, manteniendo una distancia mínima de dos metros entre cada persona y acompañados de un kit sanitario que contenga como mínimo alcohol y/o antibacterial. Adicionalmente, mientras se realiza la actividad física no se podrá sacar a las mascotas o animales (con respecto a las mascotas, el Decreto 990 del 9 de julio de 2020 señala que una sola persona por núcleo familiar puede sacarlas).
A pesar de estas medidas, en la playa del Rodadero se ha presentado una situación preocupante, particularmente en la zona que queda entre el edificio La Esmeralda y el Hotel Tamacá, pues es una playa que no es visible desde la carrera 1ra del Rodadero. Los últimos cuatro meses la comunidad ha denunciado de diferentes maneras la visita de familias enteras a estas playas: vienen a hacer ejercicio (nadar, trotar, caminar, estirar, entre otros), a realizar fiestas y fogatas, y hasta a celebrar cumpleaños (muchas veces acompañadas de sus mascotas). Estas personas asisten de manera recurrente sin ningún tipo de protección, como tapabocas, infringiendo el artículo 11 del decreto 153 de 2020, y artículos similares de decretos más recientes ya citados. Además, se observan varios extranjeros viviendo en cambuches adaptados en las lanchas parqueadas en la playa.
Fuera de lo ya señalado, muchos de estos ciudadanos infractores: someten a los perros a actividades estresantes que los obligan a ladrar constantemente por espacios de una hora o más; ponen en riesgo la salud de los perros, pues han sido víctimas de amenazas por parte de algunos miembros de la comunidad y de otros animales; o usan ningún tipo de protección para la seguridad de la comunidad y sus mascotas (bozal o collar); y dejan los excrementos de las mascotas en la playa.
Pues bien, todos estos comportamientos afectan la tranquilidad y relaciones respetuosas de las personas, según lo establecido en la Ley 1801 de 2016 en su apartado c (actividades diferentes a las aquí señaladas en vía pública o en privado, cuando trasciendan a lo público y perturben o afecten la tranquilidad de las personas). Para colmo de males, la policía no ha hecho presencia en esta zona, incluso cuando se ha llamado de manera insistente al cuadrante al número 300 8740435 y al 123. La comunidad ha recibido como respuestas que no contesten, cuelguen el teléfono o dejen esperando, faltando a la Ley 1801 de 2016 artículo 10 numeral 3 (prevenir situaciones y comportamientos que ponen en riesgo la convivencia). Varios miembros de la comunidad han solicitado que cumplan con las regulaciones establecidas para combatir la pandemia, principalmente que se respete el cierre total de las playas, así como las otras regulaciones mencionadas anteriormente.
Así mismo, en las Jornadas de Sensibilización de Tenencia Responsable de Animales, realizadas por la alcaldía durante los primeros meses del año en curso, se señalaba la importancia de proteger a los animales y denunciar cualquier acto de negligencia contra ellos, por esto se han enviado cartas a la alcadesa, pero lamentablemente no se ha obtenido respuesta. La comunidad solicita urgentemente la presencia de la policía en la playa del sector mencionado y especialmente entre las 6:00 a.m. y las 8:00 a.m. y las 5:00 p.m. y las 6:30p.m., para garantizar que se cumpla lo establecido en los decretos 153 y 200 y para aplicar las sanciones a que tengan lugar con base en las múltiples infracciones ya mencionadas.
Santa Marta está en alerta roja sanitaria, sin camas en UCI disponibles, no es posible que esto siga ocurriendo.