Días antes de que comenzara la cuarentena nacional, María Claudia 'Caya' Daza, la exasesora de Álvaro Uribe, salió del país rumbo a Miami para visitar a su hija, que estaba a punto de dar a luz. En Estados Unidos la agarró el cierre de las fronteras colombianas y al mismo tiempo el llamado a interrogatorio de la Fiscalía para que diera su versión sobre las grabaciones del Ñeñe Hernández, con quien estaría hablando sobre un posible manejo ilegal de dineros para la campaña presidencial de Iván Duque.
Sin embargo, 'Caya' Daza no ha dicho una sola palabra desde que su nombre se conoció públicamente por cuenta del expresidente Uribe. Y esa es su estrategia, como lo ha dejado claro Iván Cancino, quien se ha convertido en uno de los abogados cercanos al uribismo. Cancino se ha puesto en primera línea para explicar lo que pasa con su defendida, quien compareció desde Miami a un interrogatorio convocado por la Fiscalía. No habló. Uso su derecho a guardar silencio, y desde Miami esperará que su proceso se esclarezca sin dar explicaciones a la opinión pública.