La tecnología es modernidad, progreso, avance o conocimiento que permite la utilización de herramientas, técnicas y sistemas con el fin de servir a un propósito más grande como la resolución de problemas o hacer la vida más fácil y mejor. Por ejemplo, integrar en las aulas las nuevas tecnologías como un recurso más en el proceso de enseñanza ha permitido promover y facilitar la actitud participativa y creadora de los alumnos, la enseñanza individualizada del aprendizaje interactivo, la formación a distancia y de nuevas metodologías como la enseñanza apoyada por computadora, lo que ocasiona una verdadera transformación en el proceso de enseñanza aprendizaje al ceder el papel protagónico que tiene el alumno. Tomemos como ejemplo también el celular, entre más rápido se mueve el mundo más avances tecnológicos se ofrecen, la necesidad de ser capaz de comunicarse en cualquier momento y en cualquier lugar se ha tomado como base para para crear el teléfono celular, que cada vez se fabrica más pequeño y tiene más funciones, juegos, entretenimiento y aplicaciones, hasta llegar al punto de ser casi como un ordenador de bolsillo. Por si fuera poco, su precio en el mercado baja rápidamente conforme se lanzan nuevos productos y se vuelve más accesible.
En momentos de emergencia como el que atraviesa las mayorías de las distintas regiones del mundo por cuenta de la pandemia generada por el COVID-19 a la humanidad le ha tocado reinventarse y uno de los retos más complejos los ha afrontado la educación, ya que no tenía un plan de contingencia para no parar o retrasar a todos los agentes inmersos en ella. En este sentido hemos sido testigos del valor que tienen elementos tecnológicos para permitir comunicación entre alumnos docentes y padres de familia, entre estos elementos los más indispensables son acceso a internet, computadores de capacidad para transmitir y almacenar información, celulares o tablets y finalmente las aplicaciones que son las que permiten el enlace virtual.
Sin estos elementos básicos, pero a su vez irremplazables sería imposible que un estudiante continúe su proceso de formación, a la misma vez puede ser motivos de deserción escolar. Se puede considerar que este punto es también importante como todo lo que se ha mencionado, pero que en la realidad o en la práctica es invisibilizado y no tenido en cuenta por la mayoría de planteles educativos en nuestro país, hasta por el mismo Gobierno nacional en cabeza de su Ministerio de Educación. Es necesario tener en cuenta los diferentes niveles socio económicos de cada una de las familias o en particular de los estudiantes, ya que todos no cuentan con una computadora, internet, o un dispositivo que les permita conectarse a cada sección virtual, sería casi imposible tener una acierto en esta modalidad. Es indispensable también el ambiente familiar ya que para estudiar de una manera idónea se necesita un espacio en la casa, un lugar que genere las condiciones de poco ruido ya sea interno o exterior, de la misma manera que los horarios de estas citas académicas virtuales no se choque no se choquen con las actividades domésticas de apoyo en casa que realicen los participantes.
Otro punto importante ya hablando exactamente básica en colegios rurales o apartados espacios conurbados que para ellos la tecnología es otra cosa ya que no tiene el internet a la mano como lo tendrían estudiantes de la ciudad este será un nuevo obstáculo para el desarrollo eficaz de una formación virtual en momentos de emergencia, estas comunidades estarían ocupando los primeros lugares por ser las más perjudicadas porque en caso de un confinamiento prolongado y debido a que en su naturaleza o razón de ser, no es una necesidad contar con redes tecnológicas y más bien viven acomodados a la ambigüedad tecnológica, por ejemplo en pueblos del pacífico sur Colombiano es habitado por personas afrodescendientes e indígenas quienes escasamente cuenta con acceso a la telefonía móvil pero no con red de internet inalámbrica como es habitual en una ciudad o municipio del interior del país. Los programas del ministerio de comunicaciones (TIC) sea han interesado a lo largo de varios años en radicar su programa de computadoras para educar pero sin internet, con la paradoja más grande que alguna escuelas no cuentan con docentes especializados en aleras de informática.
Por otra parte es importante señalar que la llamada educación virtual por la que atraviesan los centros de educación superior en la actualidad no es finalmente educación virtual, sino educación a distancia como lo afirmó Henao, director de la Universidad Externado quien afirma que Educación virtual es otro concepto y lo que se está protagonizando en una educación a distancia . Existe una gran confusión o falta de información por parte de diferentes sectores como el de los padres de familia acerca de lo que realmente se está haciendo, ellos han expresado su inconformidad con la cátedra de estudio, metodologías y cargas en actividades para la casa por parte de los docentes y directivos docentes.
Sin eludir lo negativo que puede ser el uso desmedido de los medios tecnológicos una reconocida autora dice ‘A partir de esta apreciación sobre el efecto de los medios se ha construido un discurso sobre la muerte de la infancia. Desde este punto de vista, se considera que los medios han eliminado las fronteras entre la infancia y la madurez y por lo tanto han debilitado la autoridad de los adultos’’ (Tiramonti, 2005, p. 899).
Es claro que desde esta perspectiva la autora también da a entender que la televisión como dispositivo tecnológico aumenta la violencia en quienes consumen determinado tipo de contenidos, disminución en la capacidad lectora de los jóvenes, y que hace más lento el proceso en niños y jóvenes para la recepción de mensajes. Frecuentemente se observa un uso excesivo de estos dispositivos electrónicos, que repercute sobre la capacidad de concentración, el rendimiento escolar y sobre la cantidad y calidad del sueño nocturno. Algunos adolescentes que utilizan demasiado las redes sociales presentan síntomas de depresión, de déficit de sueño, sobrepeso, aislamiento social (afectados por el ciberbullying), o están expuestos a contenidos y contactos inapropiados o riesgosos, y comprometen su privacidad y la confidencialidad de sus datos personales.
Los padres habitualmente educan a sus hijos sobre las formas de relacionarse socialmente en forma personal y directa, cara a cara, y no permiten ciertas situaciones (como salidas nocturnas, beber bebidas alcohólicas o manejar vehículos) hasta que consideran que tienen una edad suficiente para poder desempeñarse en forma adecuada. En el mundo actual estamos viviendo rodeados de tecnologías y de medios interactivos: además de la televisión, los videos o DVD, los niños y los adultos acceden a muy diferentes pantallas en computadoras, tabletas digitales y teléfonos celulares táctiles (smartphones), juegos electrónicos portátiles o no (videojuegos), cámaras de foto y/o video digitales, y muchas más algunos adolescentes pueden usar el internet como una forma de escapar del mundo real o evitar el contacto personal. En consecuencia, cuanto más tiempo pasan conectados a internet, menos probable es su deseo de ver y hablar con sus familiares y amigos los adolescentes a veces usan la violencia cibernética para intimidar a otros adolescentes, empiezan a insultar o a compartir información personal sobre otros adolescentes en las redes sociales en un intento de avergonzarlos.
Esta conducta puede escalar hasta el acoso y la violencia física cuando los adolescentes pasan muchas horas al día conectados a Internet, reducen el tiempo que tienen para estar con la familia y en el trabajo escolar y en las actividades físicas. Además, según un artículo publicado un adolescente que pasa de dos a más horas conectado a Internet por tres días o más veces a la semana, se enfrenta a un mayor riesgo de ser víctima de la explotación sexual, todo estos riegos o consecuencia la podríamos enmarcar dentro del currículo oculto, ya que no se enseña en el aula y no aparece en los estándares de educación algo que a simple vista puede parecer no ser tan importante, pero conociendo a fondo lo perjudicial que puede ser la tecnología sin un previo control, sin una correcta manera de utilización como se dice coloquialmente la cura puede ser peor que la enfermedad, por lo tanto es indispensable conocer algunas correctas maneras de abordar y utilizar la tecnología ya sea para las temprana edad como a lo largo de la vida en una persona adulta.
Enseñar sobre los posibles riesgos que entrañan determinadas tecnologías puede ser el primer paso para fomentar que padres, alumnos y profesionales de todas las áreas se cuestionen un poco más sobre la forma en que emplean la tecnología y el impacto que esta tiene en su vida cotidiana. Sin embargo, no es el único método disponible, pero dejar que ocupan nuestra atención todo el día es un grave error. Lo más recomendable es ponerse límites y establecer reglas básicas para desintoxicarse un poco de la tecnología: no usar el teléfono antes de dormir, o durante los almuerzos y períodos de estudio o trabajo, etc.
La privacidad y la intimidad son difíciles de entender a temprana edad. Es importante recordar que su foto, su teléfono y sus datos personales serán accesibles para cualquier persona si los publica en internet o en redes sociales. Estos datos pueden tener un valor en el mercado. La posibilidad de que alguien pueda usar datos con fines ilícitos es muy amplia. Las redes sociales son el ejemplo más claro, pero no el único a la hora de pensar en los datos que compartimos mediante estas tecnologías. La información no solo puede ser empleada para cometer delitos si cae en manos de gente inapropiada, sino que en cierto modo es una forma de limitar nuestra privacidad. Por lo tanto, es importante preguntarse qué tanto se desea compartir y hacer un análisis de los beneficios y las consecuencias que se puede tener por compartir información.
Las nuevas tecnologías implican nuevas oportunidades, tanto para personas con buenas intenciones como para criminales que busquen nuevas formas de cometer delitos. Con esto en mente, lo recomendable siempre es desconfiar y parar un segundo a pensar antes de lanzarse a usar determinadas tecnologías. Muchas veces utilizamos aplicaciones y redes sociales sin leer atentamente lo que aceptamos. De este modo, damos permiso a las compañías para que realicen acciones de las que no siempre tenemos conciencia.
Lo mejor siempre será leer cada apartado de términos y condiciones antes de aceptar el uso de un dispositivo. Por otra parte es importante de cuidar uno de los órganos más expuesto en la utilización de dispositivos electrónicos, el ojo se adapta al nivel de luz recibido, pero si fijas el visionado en una pantalla muy iluminada mientras alrededor está oscuro estás forzando la vista; generas que el iris y la retina trabajen descoordinados sin saber muy bien a qué atender, si a la luz o a la oscuridad. La sequedad que genera visionar el ordenador durante largos períodos de tiempo propicia la tensión ocular, parpadeando mucho menos. Aportar lubricación mediante gotas mitigar estos efectos contraindicados para nuestra salud visual.
Es recomendable a los padres que no prohíban, sino que se aconseje a los hijos y se acompañe en todos sus proyectos y dudas, para así poder identificar situaciones de riesgo a tiempo. No se puede cometer el error de calmar las reacciones fuertes y los berrinches de los hijos valiéndose de los dispositivos. Si bien estos pueden tranquilizarlos y distraerlos, deben considerarse como una de las últimas opciones, ya que lo adecuado es enseñarles cómo controlarse, a crear diferentes actividades para controlar el aburrimiento, a resolver los conflictos a través del diálogo y a encontrar otras estrategias para canalizar las emociones. Los niños se pueden exponer a páginas de internet que son a todas luces inapropiadas para su edad, y a peligros como el ciberacoso, el grooming, y el sexting cuando no se ponen límites ni se tiene una vigilancia parental adecuada.
Como última medida está la de los teléfonos móviles han venido para quedarse y cada vez son más los menores de edad que cuentan con uno de estos dispositivos en el bolsillo o en su mochila. A nosotros nos aportan seguridad porque nos mantienen en contacto con ellos y los tenemos localizados. Para ellos es el “centro de su universo” donde guardan sus más preciados “tesoros”: fotos de sus amigos, de las cosas que les gustan, de sus ídolos, sus canciones, etc. Si se le permite que lleve consigo un dispositivo conectado a Internet las 24h es porque que es capaz de asumir las consecuencias de su uso: qué puede y qué no puede hacer con él. Restringir el uso de cualquier tipo de tecnología a la hora de las comidas y demás encuentros familiares y sociales. Se deben recargar los dispositivos durante la noche y fuera de la habitación del niño, de esta manera se evitará la tentación de usarlo cuando debe estar durmiendo.
Conclusión
Como dijo una vez un filósofo, ‘’comienza a existir sin haber existido antes y aun existiendo deja de existir’’ Este podría ser el significado de contingencia, es algo que no está ni que se pensaba que podría llegar, pero que se presenta de manera inesperada y que toca servirse del propio entendimiento para afrontarlo de la mejor manera. De esta misma forma el mundo hoy ha cambiado por culpa de una pandemia que aún deja muchos interrogantes o vacíos acerca de cómo se formó pero que sin duda alguna no permitirá que ese mundo que hoy cambió, mañana vuelva a ser el mismo, no será el mismo para el embolador de zapatos, o la persona que vivía del dia adia, o ara la señora que vende pescado en la plaza de mercado de una pueblo, ni para una presidente, o el encargado de la seguridad militar, es lo mismo trastornoque zucumbira el frustrado suño de un universitario que a razón de salvaguardar su vida no pueda graduarse en una ceremonia formal con flores, globos y fotos rodeado de sus allegados.
Al final de este momento de emergencia dejará además de empresas en quiebra y ciudadanos desempleados algún tipo de enseñanza, que permita valorar la vida, la salud, la familia y los encuentros gratos entre amigos. Que los padres aprendan que la educación de sus hijos no es responsabilidad única del docente o la institución educativa sino también del o ella como acudientes y responsables de unas mentes frágiles con intenciones de aprender cosas buenas para en un futuro cercano ser unas verdaderas productoras de lo bueno como un aporte positivo de cada familia que permita el empuje a la construcción de una mejor Nación, sobre los hombros de los padres cae el peso de la conducta que pueda tomar cada uno le los hijos, por eso es mejor que estén siempre vigilantes del consumo tecnológico, ya que como se ha mencionado anteriormente estos nuevos productos tecnológicos son portadores positivos de contenido bueno o malo según el uso medido o desmedido así mismo tendría un tipo de consecuencia.
El 2020 ha sido un año esperanzador en el que nos hemos sentidos rodeados de modernidad, esa modernidad que en sus inicios fue inventada por europeos, que tiene elementos como progreso, autonomía, desarrollo, bienestar, libertad, razón, ciencia, tecnica y tecnologia entre otras permitieron una mayor destreza y capacidades para enfrentar la contingencia, capciosamente a la fuerza algunos sectores como el de la salud y la ciencia han sido forzada a una respuesta desafiante por aumentar su capacidad, ya que se encontraban enclaustradas por malas administraciones gubernamentales, por dirigentes quienes desangraban sus patrimonios con la desviación de recursos y quiza no se centrron en lo que era prioritario, todo esto será visto también como un punto a favor para el pueblo llano que por una situación de emergencia quede con centros de salud mejores dotados, para los estratos bajos con menos recursos accedan a un mínimo vital de agua o acceso a una red de internet inalámbrica, como también aparados con más beneficios de prosperidad social. El más importante aprendizaje es que hoy nos cuidamos entre todos, para en un mañana volvernos a encontrar.