Resulta paradójico que La Guajira sea de los únicos departamentos del país que no tiene casos de Covid-19. Cuando pensamos en el riesgo de contagio que tiene el departamento, resulta aún más inverosímil.
Para empezar tenemos más de 200 trochas o caminos ilegales entre Venezuela y La Guajira, sin controles migratorios y mucho menos de sanidad. Todos los días siguen llegando venezolanos buscando atención médica al departamento.
Adicional, en el departamento de La Guajira opera la mina de carbón a cielo abierto más grande del mundo. Una buena parte de sus trabajadores ni siquiera viven en la Guajira, sino que vienen de Valledupar, Santamarta y Barranquilla. Cerrejon los recoje todos los días en sus casa y los vuelve a llevar. ¿Quien garantiza que en esos miles de desplazamientos no haya habido contagio alguno? Cerrejon no previno, ni manejo turnos para evitar contagios.
Cabe resaltar que incluso la semana pasada hubo una comisión de españoles en Albania, municipio Guajiro visitando el Cerrejon, y que un estadounidense con síntomas claros de Covid-19 permanece aislado dentro del campamento de la mina, sin siquiera reportarlo a las autoridades. Cerrejon no informa sus posibles casos actuales de Covid-19 para mantener control de negociación con el sindicato en la actual convención y para que las autoridades no tengan ingreso a sus instalaciones.
En la actualidad ya hay personas con síntomas de Covid-19 en la Guajira, no hay hospitales de tercer nivel, no hay departamentos de salud haciendo algo, no hay test, no hay un doliente por este departamento.
La pregunta es: ¿Todavía creen que en la Guajira no hay coronavirus?