Desde hace más de cinco décadas, Roosevelt Castro Bohórquez transpira fútbol. El balón se le ha convertido en un órgano adicional de su cuerpo. No en vano el periodista deportivo afiliado al CIPA, la Acord y la AIPS lo jugó, lo dirigió, lo juzgó, lo habló, lo escribió y lo filmó.
“Son muchos los roles que he tenido en el fútbol, en los que ayudado a las personas a crecer en todos los sentidos”, comenta pausado el también llamado “Arbitro de la paz”.
Es que este tolimense de nacimiento, pero antioqueño de corazón, tiene un currículo marcado por la pelota. Dirigió los equipos del Barrio Florida Nueva-Estadio, un equipo satélite del DIM, las Divisiones inferiores de la Universidad Pontificia Bolivariana, entre otros. Igualmente, co-creador junto con Guillermo Hinestroza Isaza y Antonio Franco Ruiz del moderno Babyfútbol.
De igual forma, y en su rol de periodista, fundó en su colegio del bachillerato el periódico “El Ideal Juvenil”. Hizo parte de grupos periodísticos en radio, prensa, televisión y emprendimientos propios en internet.
“En radio, transmitimos fútbol profesional con humor, en una propuesta llamada “El Despelote Deportivo”. Igualmente, realizamos otro llamado “El Preliminar…por humor al deporte”, un espacio en el dial antioqueño que combinaba el humor, con los deportes y los valores. Ambos los emitimos por el Sistema Sonoro de Colombia, sede Medellín, y pretendían bajar los altos niveles de agresividad, violencia y estrés en el fútbol y generar espacios para la paz y la convivencia en ese contexto”, comenta el comunicador de la Universidad de Antioquia.
De igual forma, produjo, realizó y dirigió los programas televisivos “Historias a la Redonda” y La Pelotera Deportiva”. Ambos se emitieron por el Canal CNC y Expresiones de Antioquia, de Cable Unión de Occidente Medellín. El primero fue un espacio en la pantalla chica en la que realizaba perfiles, crónicas y reportajes mostrando la parte humana de los diferentes públicos de la pelota. “La Pelotera quería realizar una caricatura den programa deportivo, con los objetivos similares a los de El Despelote”, asevera el bachiller del Liceo Nacional Marco Fidel Suárez.
En muchos de ellos, ha llevado mensajes de paz y convivencia en el contexto del fútbol. “Desde que jugaba en las mangas cercanas al Estadio Atanasio Girardot, siempre lo hice con esos mensajes de paz. Ahora ya no tenemos esos terrenos de juego, en los que tratábamos de imitar a los grandes del balón”, evoca con nostalgia el cuarto hijo de Roosevelt, un jubilado de la Federación de Cafeteros, y de Cecilia, una hacendosa ama de casa.
La verde, una norma de la ventaja al amor
Cuando apareció la tarjeta verde en la Segunda División de Italia, para la temporada 2015-2016, un efecto boomerang ocurrió en Medellín, Colombia. Ese golpe de opinión vino a reivindicar al periodista deportivo y árbitro de fútbol Roosevelt Castro Bohórquez.
Es que el versátil comunicador se había creado esta estrategia para el juego limpio, hace más de 30 años. Las canchas polvorientas fueron testigo mudo de esta propuesta del llamado “Árbitro de la Paz”, surgida de este inquieto hombre del fútbol.
“Empecé con un arbitraje didáctico con los niños del fútbol, enseñándoles las 17 reglas del fútbol. Luego le incorporé otro ingrediente: el del fortalecimiento en valores. Para ello les repartía a los jóvenes futbolistas unas estampitas del Divino Niño, pero, y ante tanta diferencias religiosas y espirituales, opté por cambiarlas por un código más universal, como la tarjeta verde”, explica el periodista deportivo nacido el 16 de abril de 1959.
Las tarjetas en el fútbol son una analogía del semáforo. Fueron inventadas por el inglés Ken Aston para detener la violencia. Solo le faltó la verde para completar la triada cromática, que salió del ingenio de este hombre del deporte.
“El árbitro británico señaló que con el rojo detenía la violencia, con el amarillo estabas en alerta y solo le faltó la verde, con la que quiero premiar las buenas acciones de juego limpio que tengan los diferentes públicos del fútbol, en especial a los jugadores. Es una apuesta a la paz y la convivencia en este contexto”, aclara el también llamado “Juez de los Valores”.
Luego de su tránsito académico como la Cumbre Mundial de Paz, el Congreso Internacional de Comunicación Social para la Paz y de su bendición Papal otorgada por Francisco I, ocurrida el pasado 9 de septiembre de 2017, ahora esta bonita acción Fair Play hace su recorrido en el fútbol en diferentes campeonatos y torneos, que ven las bondades de su creador. “Fuera de Italia también la vienen implementando con gran éxito en las categorías inferiores de la Real Federación Andaluza de Fútbol. Igualmente en la Copa Verde en Belem Do Pará, Brasil; en Chile y la ONG “Fútbol Más”; los Torneos de Formación de AFA en Argentina, la Asociación Irlandesa de Fútbol. , y algunos colectivos de árbitros de México, Francia y Japón”, comenta este comunicador del deporte.
¿La Verde en Japón?
No son cuentos chinos: la tarjeta verde llegó al Sistema Educativo de Japón. La Junta Metropolitana de Educación de Tokio creó la "Respuesta de Materiales de Enseñanza de Educación Moral Metropolitana de Tokio” para apoyar la implementación fluida de "moralidad de currículo especial" en cada escuela pública.
Para ello puso en circulación “El Libro de la Moral”, de carácter de lectura obligatoria para los ciclos primaria y secundaria.
En lo concerniente a las relaciones con las personas, orientado para los grupos de tercer ciclo de primaria, el libro aporta un capítulo especial a esta estrategia del juego limpio, ideada por el periodista y exábitro de fútbol Roosevelt Castro Bohórquez, hace más de tres décadas.
Bajo el título “La otra tarjeta”, el logro editorial japonés inculca a los niños los valores de la amabilidad y compasión con sus congéneres.
“Me alegra mucho que nuestra estrategia le juegue limpio a los valores de los niños, en una cultura milenaria como la japonesa”, señala el ideólogo de esta cartulina, que hace presencia en otros países.
“Espero que se implemente en nuestro fútbol, para ayudar a la paz y la convivencia en este contexto”, recalcó el periodista deportivo tolimense y quien fuera exaltado por el colectivo arbitral Arbiantioquia por esta iniciativa del Fair Play, el pasado mes de diciembre de 2017.
Así la tarjeta verde se devolvió cual boomerang a su lugar de origen, para reivindicar a este hombre que es puro corazón.
