Una vez Andrés Cancimance ocupó su puesto en la Asamblea del Putumayo, gracias al Estatuto de Oposición al no quedar elegido como gobernador, la Unidad de Protección (UNP) le anunció que le retiraría su esquema de seguridad. Había concluido ya su campaña y los recorridos por el departamento, controlado por las disidencias de las Farc y los narcotraficantes, por lo que ya no era necesario que lo tuviera. Pero al tercer día sin seguridad, Cancimance, recibió mensajes por redes sociales del Cartel de Sinaloa, declarándolo objetivo militar y ofreciendo $30 millones por su cabeza. Ahora Andrés Cancimance deberá enviarle nuevamente a la UNP las amenazas que ha recibido por su activismo LGBTI y la defensa del acuerdo de paz e iniciar el proceso para que Pablo Elías González, director de la UNP, le regrese su esquema.
