El pasado 27 de octubre de 2019 se llevaron a cabo las elecciones regionales para escoger a través de voto popular alcaldes, gobernadores, asambleas, concejos y juntas administradoras locales. Por primera vez en la historia de Colombia se eligió como alcalde de Bogotá a una mujer, además de homosexual, algo jamás visto en un país tremendamente machista y homofóbico.
Para los escépticos del voto demuestra que votar si sirve, votar es el único mecanismo efectivo de protesta con el que cuenta la ciudadanía y funciona, se conoce de antemano que con gobiernos como el actual donde se llega al poder debiendo favores políticos a los grandes empresarios y a las maquinarias que colocan presidentes, las reformas, los impuestos y las leyes que desfavorecen al pueblo se van a aplicar si o si, así la gente salga a protestar.
La situación actual del país y todo lo ocurrido en Colombia con el nuevo gobierno, la aplicación de nuevas reformas, los actos vandálicos y el caos que vivió Bogotá durante los días de protestas no se hubieran presentado si la gente hubiera salido a votar y a votar informada. ¡En Colombia los buenos somos más!
El voto por Claudia López fue voto de opinión, voto de personas cansadas de la corrupción, voto de personas informadas, conscientes de la realidad política del país y que desean un cambio.
Bogotá da ejemplo y demuestra de esta forma que es la ciudad con las mejores universidades de país, las mejores oportunidades para que la gente se informe y se eduque, una ciudad diversa e inclusiva, cosmopolita, una ciudad donde se respeta el derecho a la intimidad y a la sexualidad y que no discrimina, una ciudad que no come entero, una ciudad llena de oportunidades para crecer, donde no se reconocen ni se apoyan maquinarias políticas, votos por partidos, votos por el que dijo tal, votos amarrados, votos asociados a tejas, tamales o los ya conocidos 50 mil pesitos, acá el voto honesto prevalece, quizá será esta la razón por la cual Bogotá no es ni será el fortín político de ningún mesías o salvador, Bogotá piensa.
Orgullosamente vote por usted alcaldesa Claudia López, reconozco su gestión política y su fuerte lucha contra la corrupción, razón por la cual creo yo, ganó usted las elecciones, pero dejo en claro que, si al terminar el mandato su gestión no fue conforme con sus promesas de campaña, su administración fue mediocre, tuvo algún indicio de corrupción o violación a los derechos humanos, nexos con políticos o personas corruptas, nunca más volvería a votar por usted, ni por el que diga usted y su partido político quedará señalado de por vida.
Deseo lo mejor en su administración: que durante su mandato se excluya y se trate a toda costa de eliminar la corrupción, se respeten los derechos humanos, se dé prioridad a la educación, se respete el estado laico, la diversidad, el derecho a pensar distinto y a ser diferente. Bienvenida, mi alcaldesa, ¡la igualdad es imparable!