Para ser franco, luego de éste fin de semana la hoja en blanco para mi fue el gran reto, no por falta de información, para nada, creo que fue por lo contrario, exceso de información, exceso de asco, impotencia de ver un país en el que todo vale.
Desde hace tres semanas las campañas políticas tomaron un rumbo absolutamente macabro, ataques desde dos flancos, supuestos y posibles futuros presidentes de la república iniciaron una de las peores y más asquerosas batallas para llegar a Casa de Nariño.
Unos acusaban a Santos de recibir dineros del narcotráfico y de tener un asesor de campaña corrupto y sucio (JJ. Rendón) luego, del lado de Zuluaga (Uribe) les descubrieron un centro de interceptaciones ilegales y a un Hacker (No lo pondré como supuesto porque ya confesó) quien estaba “Chuzando” a la guerrilla de las Farc, a integrantes de la mesa de diálogos en La Habana, incluido al Actual presidente candidato Juan Manuel Santos y nada más y nada menos que al Ejército Nacional.
De inmediato empezó el revuelo y el canal RCN puso al descubierto la relación de la campaña de Zuluaga con el hacker a través de un video de seguridad del canal, dónde se veía el ingreso de Luís Alfonso Hoyos, asesor espiritual de la campaña y Andrés Sepúlveda para entrevistarse con Rodrígo Pardo, director de Noticias RCN y entregarle información privilegiada.
En defensa de la campaña “Zuluaguista” (Uribista) el Senador electo y expresidente salió al contraataque como siempre, altivo y contestatario, inflando el pecho aseverando tener las prueba completas y contundentes de la existencia de los dineros sucios dentro de la campaña de Santos.
De inmediato la Fiscalía General de la Nación lo llamó a declarar y a que entregara las dichosas pruebas contundentes y pasaron los días y como diría la canción ...“Nos dieron las 12, la 1, las 2 y las 3”... hasta que varios días después por fin llegó, el país estaba expectante creímos que se desataría el mayor polvorín de este milenio en la política colombiana pero de nada sirvió llegar a la Fiscalía con el taco lleno de pólvora y la mecha mojada. El ex mandatario entró se amarró los zapatos y volvió a salir con la excusa de que no tenía garantías para decir la verdad, sólo la verdad y nada más que la verdad; mejor le entregaba las contundentes pruebas a su buen amigo el procurador Ordoñez y el país quedó con las cajas destempladas.
Después de semejante episodio bochornoso los días transcurrieron con aparente normalidad, hasta que llegó el día “D” Sábado 17 de Mayo, en horas de la tarde el “Littel Boy” medíatico se soltó en caída libre justo sobre la cara de Oscar Ivan Zuluaga, la prueba reina que demostraría que él si conocía del accionar del Hacker y su ilícito proceder, cuestión que había negado categóricamente apenas se descubrió la central de interceptaciones.
El video publicado por Revista Semana, captado a escondidas por un miembro de la campaña del candidato, algunos le llaman “Infiltrado” mostraba que Zuluaga conocía de las maniobras de Sepúlveda, en el video, el famoso Hacker le explicaba al candidato que tenía datos sobre operativos militares, gubernamentales y de la guerrilla para usarlos en contra de su principal adversario Juan Manuel Santo y OIZ al final de toda la explicación le dijo: “Nos queda un mes para dar el golpe hermano” ¿Palabras dignas de la política o de los capos italianos de cosa nostra?
La famosa “reaccionistis” por las redes sociales no se hizo esperar, al punto de convertir el HT (Hashtag) #OIZRENUNCIE en tendencia mundial por más de 12 horas en Twitter, el caldo de cultivo para la tan anhelada renuncia del candidato estaba listo, se creyó que luego de semejante prueba y con semejante fuente no le quedaría más remedio que salir con pundonor y algunas lágrimas de cocodrilo a decirle al país entero que renunciaba a su candidatura. Del lado de Zuluaga personajes cómo Tomás Uribe aseguraban que fue un montaje, otros justificaron el hecho ya que se trataba de que se tenían intervenidas las comunicaciones de las Farc, echando a un lado el gravísimo hecho que también se estaban interceptando información de SEGURIDAD NACIONAL.
El Domingo 18 de Mayo Ozcar Ivan Zuluaga dio una rueda de prensa sin antes adevertirle a los medios presentes que sólo iba a hacer un comunicado y no respondería ninguna pregunta, junto a el se encontraba el abogado Jaime Granados. Zuluaga en su comunicado se declaró “Víctima de un vulgar montaje” y que sería materia de investigación por su representante no sin antes decir que todo esto fue fraguado por la siniestra mano de JJ Rendón quien había renunciado a la campaña santista, ya hace algunas semanas por el escándalo desatado por las declaraciones de uno de los Hemanos “Comba” a quién supuestamente el grupo narcotraficante le había pagado la suntuosa suma de 12 millones de Dólares de los cuales no se sabe nada ni se ha probado nada.
El candidato por el partido Centro Democrático se presentó a una rueda de prensa con un abogado, no pienso hablar sobre la reputación ni la clase de clientes que maneja, eso ya es de conocimiento público y cada quién saca sus conclusiones pero el hecho de presentarse con un abogado, deja mucho que pensar, cuando alguien que es inocente y es víctima de un “Montaje” no responde preguntas de los medios y pone a su abogado a hablar. Pretendiendo desviar el trasfondo y la gravedad del video que al mejor estilo del chavo del ocho, y sin querer queriendo el hijo del candidato, David Zuluaga advirtió días antes de la existencia del presunto video y del daño que le podría causar a la campaña, cuestión que a mi manera de ver sólo legitimó que no fue un montaje.
Al final del cuento solo vimos una pelea de perros que sólo enseñaron los dientes y yo me pregunto:
¿Qué se puede esperar de candidatos que en época electoral recurren a este tipo de artimañas cuando lleguen al poder?
¿El que nada debe nada teme pero mejor lleve abogado?
¿Cuando saldrán a la luz las pruebas que dice tener Uribe, las guardó con sus declaraciones de renta?
¿El presidente de la “Paz” es consecuente con el lenguaje que usa en su discurso?
¿Qué pensará el ministro defensa Juan Carlos Pinzón al saber que la información clasificada del ejército pudo filtrarse por internet, dónde dejó la “Defensa”?
¿Realmente vamos a votar por lo que dicen las encuestas o por los candidatos?