Tras cinco días de manifestaciones y represión que ya deja 15 personas muertas, el gobierno salió a calmar las tensiones pidiendo perdón por la crisis que sufre el país, y anunciando una serie de medidas para hacer frente a la situación.
El gobierno chileno sigue cediendo. El presidente Sebastián Piñera se vio obligado a bajar la guardia ante el descontento que los ciudadanos han manifestado a través de las protestas, algunas incluso violentas que se han desatado durante los últimos días.
A través de un discurso, el mandatario pidió perdón a los ciudadanos por la "falta de visión" ante las necesidades que atraviesan los chilenos, y reconoció que la crisis se ha venido presentando hace décadas. "Los distintos gobiernos no fueron ni fuimos capaces de reconocer esta situación en toda su magnitud" dijo el mandatario. "Esta situación de inequidad, de abuso, que ha significado una expresión genuina y auténtica de millones y millones de chilenos" continuó.
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— Sebastian Piñera (@sebastianpinera) October 23, 2019
Al mismo tiempo Piñera dijo que la ola de protestas es una oportunidad "para recuperar el tiempo perdido" y "pasar a la acción", refiriéndose a una serie de reformas en la pensión, salud y medicamentos, salario mínimo, así como a tarifas e impuestos, que se elaboraron tras haber escuchado a distintos sectores del país.
Frente a la reforma al sistema de pensiones, el presidente plantea varios aumentos. Uno de ellos, el 20 % de la Pensión Básica Solidaria, que según dijo, beneficiará a unas 590 mil personas, y otro de 20 % en la contribución del Estado para las clases medias y las mujeres.
También prometió acelerar un proyecto de ley que ya se encuentra en el Congreso, que pretender crear un seguro contra enfermedades catastróficas, y que fija un límite en el gasto sobre los procedimientos médicos, de manera que el Estado sea quien cubra el excedente, si se presenta el caso.
Piñera mencionó un convenio para reducir el precio de los medicamentos y un seguro que cubra parte de los que no son entregados por el programa de Garantías Explícitas en Salud (GES) o la Ley Ricarte Soto.
Entre los puntos más reclamados se encuentra el Ingreso Mínimo Garantizado, el cual se fijó en $350 mil pesos, lo que equivale a unos 480 dólares, y aumenta en comparación con los $301 mil pesos de la actualidad. El beneficio se aplicará tanto para los menores de 15 años, como para los mayores de 65.
Respecto al servicio eléctrico, se plantea un mecanismo para estabilizar las tarifas y anular el alza que recientemente se situó en 9,2 %.
Se aplicarán mayores impuestos a los sectores que generan mayores ingresos para aumentar la recaudación tributaria. Y fijando mayores aportes de quienes produzcan más capital para inyectarlos a los menos favorecidos y así aunar a una mayor equidad en áreas como "seguridad, luminarias, infraestructura, parques, deporte, recreación y otros".
Habrá además una reducción en los sueldos más altos en la administración pública, tanto como una disminución en el número de parlamentarios y limitación a su reelección.
Piñera finalmente se refirió a los daños causados durante las manifestaciones, y dijo que para la reconstrucción de infraestructura púbica, en especial del Metro, se invertirán unos 350 millones de dólares.
El mandatario señaló que esta agenda social será enviada al Congreso "o implementada directamente por el gobierno".
Hemos escuchado fuerte y clara la voz de la gente expresando pacíficamente sus problemas, sus dolores, sus sueños y sus esperanzas de una vida mejor. Hoy quiero compartir con todos mis compatriotas las principales medidas y componentes q impulsaremos con esta #NuevaAgendaSocial pic.twitter.com/gSb88mMrvG
— Sebastian Piñera (@sebastianpinera) October 23, 2019
* Con información de Reuters y EFE.
** *Artículo originalmente publicado en France 24, bajo el título Chile: el presidente Piñera pide perdón y anuncia paquete de reformas para paliar la crisis.
