El limbo
Aquí están quienes los políticos/gobernantes que hicieron el bien, pero no por las causas correctas: de nada nos sirve construir bases útiles si tras ellas hay intereses malintencionados, si quien lo realiza lo hace por intereses particulares. Aquí podemos ubicar a Juan Manuel Santos: La paz con la Farc sin duda ha sido uno de los mayores logros en la historia del país, aun así es cuestionable las razones por las cuales se hace: ¿fue por las víctimas?, ¿fue por los intereses articulados de grandes empresas por los recursos donde operaba la guerrilla?, ¿simplemente fue una estrategia por conservar el poder otros 4 años? No lo sabemos.
Segundo círculo
Aquí están quienes destruyeron la vida de alguien por su lujuria, aquí está lo más repugnante de nuestra sociedad: violadores. La situación es pésima, se han presentado más de 20 mil violaciones solo a menores. Parece que somos es incapaces de proteger —independientemente de sus condiciones— a mujeres y niños, tal vez se deba a las deplorables condiciones en donde se desarrolla la vida de la mayoría de estas personas; es que si no somos capaces de brindar condiciones que por lo menos propicien el cuidado de estos, no podemos esperar mejoras en las estadística.
Tercer círculo
El ansia de poder lleva a las personas y sobre todo a grandes figuras políticas a pecar por gula. La egolatría y el egoísmo llevan a dirigentes como Álvaro Uribe a creer que son figuras indispensables para el desarrollo del país; pero al final terminan siendo la piedra en el camino para la construcción de una mejor sociedad. Sus ideas son arcaicas, inútiles y aun así peligrosas para el país —en la medida que estas ideas son una especie de faro para el gobierno— y que estas rigen la forma en la que viven los colombianos del común. Es evidentemente es uno de los tantos pecados del expresidente sin importar si es por interés personal o no.
Cuarto círculo
Ser rico no es malo siempre y cuando se llegue allí a través de medios éticos, es aquí donde llegan quienes lo han hecho todo por dinero, desde quienes roban tierra tanto de forma “legal” o ilegal, pero también empresarios como Sarmiento Angulo que pese a que sus empresas son legalmente constituidas, carece del valor ético ideal, pues como es común en el gremio financiero se destruye a las personas por su necesidad; sus relaciones personales y comerciales son también bastante cuestionables como Odebrecht o la irresponsabilidad que lo caracterizan como empresario, claro ejemplo de ello es la tragedia del puente Chirajara.
Quinto círculo:
Los famosos golpes que le propinó Vargas Lleras a uno de sus escoltas en plena campaña presidencial, son muestra del tipo de persona que es: un iracundo. El pecado no es exclusivo de él pero sí es destacable que sea causada de la perceptible frustración del exvicepresidente por fracasar en su intento por llegar a la Casa de Nariño y lo insignificante que resultó ser para el país. Esperemos que siga siendo igual de mínimo su aporte al acontecer nacional como lo ha sido siempre.
Sexto círculo
Probablemente el segundo círculo más densamente poblado de todos —después del séptimo—, aquí se encuentran los herejes, quienes atentaron contra el pueblo y descaradamente pretenden ser recordados de manera positiva. Es el caso de todo —hasta ahora— el gobierno Duque: las acciones que ha tomado parecen no sólo ir contra de sus promesas de campaña sino de las necesidades de la población —que en teoría lo eligió—, atentando incluso contra los más necesitados con cada proyecto presentado al congreso.
Séptimo círculo
El resultado de unas condiciones particulares y deplorables en parte del país. Sigue siendo injustificable la violencia, pero hay que aceptar que como sociedad no hemos hecho lo suficiente para sacar a jóvenes de barrios marginales de lo que seguramente sea su futuro: el sicariato. Las posibilidades para mejorar la vida y cambiar el pensamiento de estos son indispensables para construir una sociedad equitativa.
Octavo círculo
Utilizar su figura como profesor en la pasada campaña presidencial le resultó a Sergio Fajardo de buen provecho para sacar votos; muchos pegaron el grito al cielo cuando no superó la primera vuelta presidencial, pero Sergio está en este círculo por ser un fraude. Durante campaña la educación fue su tema central, pero fuera de esta guarda silencio en cada ataque que se le hace a la misma. No deja de ser un ventajoso e hipócrita, ¿acaso iba a gobernar con la misma falta de carácter? No se puede pretender utilizar una posición cuando le conviene y no en los momentos más críticos.
Noveno circulo
Aquí esta casa política de la costa: los Gerlein. La captura por corrupción de la “ahijada política” de Roberto Gerlein, Aída Merlano por una estructura organizada para la compra de votos y la posterior huida de la misma deja muchos interrogantes sobre la naturaleza de la huida, pese a que dijo estar dispuesta a colaborar con la justicia: ¿fue por amenazas del clan Gerlein?, ¿sabían de la compra de votos?
Al salir del infierno solo nos queda esperar que Beatriz nos lleve al cielo, cabe aclarar que no será una figura individual, serán las personas dispuestas a redimir y purificar el pecado de este pedazo de tierra llamado Colombia.