Unos 30.000 mil millones de euros le ha costado ya a la Volkswagen la manipulación de los sistemas de control de escape de gases de 11 millones de vehículos diésel vendidos en todo el mundo que se destapó hace 4 años.
Ahora el mayor fabricante de automóviles del mundo enfrenta otro dolor de cabeza: una demanda colectiva por daños y perjuicios, la primera en la historia alemana, de unos 400.000 propietarios de vehículos diésel en Alemania.
Los propietarios argumentan que el ocultar los niveles de contaminación de sus autos los ha perjudicado, mientras que la defensa de Volkswagen contraataca diciendo que los autos manipulados no comportaron riesgos ni daños a sus propietarios.
Hace una semana la fiscalía alemana acusó a los dirigentes de Volkswagen de haber ocultado a sus accionistas los costos que tendría el fraude por las emisiones de sus vehículos diésel.
Inicialmente se admitió la manipulación de medio millón de motores, pero después se constató que fueron 11 millones los autos manipulados. Los accionistas quieren ahora ser compensados por el desplome de las acciones mientras Volkswagen acaba de iniciar un gran programa de automóviles eléctricos para limpiar un poco su ya oscura fama.
El examen de esta acción colectiva durará al menos hasta 2023, debido a la posibilidad de una apelación ante la Corte Federal, según Volkswagen. Después, los procedimientos individuales pueden tomar al menos un año más.
*Artículo originalmente publicado en Radio Francia Internacional, bajo el título de "Arranca en Alemania inédito juicio contra Volkswagen por el ‘dieselgate’"