El 30 de septiembre del 2011 el entonces presidente Juan Manuel Santos anunció en Santa Marta la construcción de hotel de 7 estrellas Six Senses en el corazón del Parque Tayrona. Lujo ecológico a nivel de lo más sofisticado del mundo, traído por una empresa tailandesa que tenía como socias en Colombia a las hermanas Claudia y Beatriz Dávila Zúñiga, representantes de la Sociedad Promotora Arrecifes S.A.S. Las Davila habían decidido incursionar en un terreno hasta entonces monopolizado por el francés Jean Claude Bessudo, propietario de Aviatur, pionero del turismo ambiental en el país e instalado en el Parque con sus eco-cabañas. Querían además impulsar el proyecto Los Ciruelos, un complejo diseñado que empezaba con 12 eco-habs y se expandirían a cuarenta en la misma área. Como buenas samarias se sentían pisando en suelo conocido.
Las Zuñiga son hermanas de José Francisco Zuñiga quien llegó en el 2004 a la alcaldía de Santa Marta y que en el 2009 confesó haber recibido apoyo para la alcaldía de Hernán Giraldo, comandante del Frente Resistencia Tayrona de las Autodefensas Unidas de Colombia. Fue condenado por el Juzgado Penal de Santa Marta a cuatro años y dos meses de prisión.
Defensores del medio ambiente convencidos de la urgencia de preservar la Sierra y sus alrededores comenzaron una pelea jurídica para atravesársele a los dos proyectos. Entre quienes lideraron el pleito fue la fundación Mision Colombia, dirigida por el abogado Alejandro Arias, que demandó ambos proyectos. Los indígenas arhuacos han defendido la famosa línea negra, que demarca su tierras ancestrales sagradas, donde no se puede construir, razón por la cual se oponían a ambas iniciativas turísticas.
En enero del 2012 la Autoridad Nacional de Licencias Ambientales, (ANLA) desistió de legislar sobre el proyecto y le pasó el balón a la Sistema de Parques Naturales, desde el 2004 en cabeza de Julia Miranda. La demanda del abogado Arias prosperó y un juez negó la posibilidad de construir y le ordenó a Six Sense y a Arrecifes realizar una consulta a las cuatro comunidades indígenas que habitan el Tayrona: koguis, arhuacos, wiwas y kankuamos. Los pueblos indígenas de la Sierra se opusieron al proyecto y recordaron que en el sitio donde se levantarían las ecohabs de El Ciruelo era lugar de vivienda del Mama Teiku, es decir un territorio ancestral.
La idea del Six Senses permaneció dormido hasta la llegada a la Presidencia de Iván Duque. Las hermanas Dávila cuentan con un gran aliado, el Ex Presidente Alvaro Uribe, quien apoya la iniciativa privada en el sector turístico sin restricción alguna
Hace cuatro meses el hoy senador Uribe en una visita a Santa Marta el 24 mayo reafirmó púbicamente su posición e incluso le echó un vainazo a su pupilo Iván Duque: “No puede ser que el presidente Duque dice que el turismo es el nuevo petróleo de Colombia y Parques Nacionales ponga todos los obstáculos que impiden el desarrollo de infraestructura turística en Tayrona (…) tienen que ayudar, hay que permitir que esos proyectos se instalen”.
Se trataba de un claro espaldarazo a las hermanas Davilas que insisten en el proyecto y están enfrentadas a la directora de Parques Nacionales Julia Miranda quien se mantiene firme en la defensa del Parque Tayrona, del lado de la decisión judicial.
En los quince años que lleva al frente de la entidad protectora de los parques nacionales es mucho lo que ha avanzado. Ha declarado ocho nuevas áreas protegidas: Orito Ingi Andi, Selva de Florencia, Serranía de los Yariguíes, Uramba Bahía Málaga, Yaigojé Apaporis, Complejo Volcánico Doña Juana – Cascabel, Acandí-Playón-Playona y Bahía Portete, además de duplicar el tamaño de Chiribiquete, el emblemático y singular recurso natural. Una firmeza que le ha llevado a obtener reconocimientos internacionales como el de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN).
Las Dávila Zuñiga no dan el brazo a torcer y han interpuesto una demanda que busca tumbar la decisión judicial en la que se apoya Julia Miranda. Su intención sigue siendo la de habilitar, como ya se está haciendo, el Parque Tayrona para el turismo pero con restricciones. Para ello ha abierto una nueva licitación para identificar un nuevo operador turístico, ya que se le cumple el período a Aviatur en cabeza de Jean Claude Bessudo. Es tal el pleito que se viene por delante que éste ha anunciado que no se presentará nuevamente mientras las hermanas Davila buscan hacer valer su poder político. Una tensión regional que escalo a la Casa de Nariño donde el próximo 10 de septiembre el Presidente Duque destapará sus cartas con la directora de Parques Nacionales Julia Mirada y los representantes de las intersadas hermanas Dávila Zuñiga. De interrumpirse el proceso de la licitación de la operación del Parque Tayrona éste estaría cerrado más de seis meses, sacrificando la temporada más alta del año en diciembre.
