"Sentía su piel sudorosa y su aliento nauseabundo, mientras su mano se deslizaba por debajo de mi vestido, entraba en mis pantaloncitos y me tocaba en donde mi mamá me había enseñado que nadie me podía tocar. Estoy segura de que sintió que mis piernas temblaban sin parar; no le importó". Así narró por primera vez la periodista Vicky Dávila en su columna de la Revista Semana el abuso sexual que sufrió de su tío paterno cuando aún tenía 6 años, edad en la que gozaba de pasar el tiempo jugando en la casa de sus abuelos.
En una página de relato, Dávila decidió sacar el dolor y la rabia que aún guarda por aquel momento y pidió la cadena perpetua para abusadores sexuales de menores, como su tío, de quien después de 40 años le parece "oír la respiración agitada". La periodista aprovechó el debate que prepara el Gobierno para aplicar penas más fuertes a quienes hagan tocamientos o violen a niños y niñas en el país.
#AMíTambiénMePasó escribí esta columna pensando en el silencio de los niños que son abusados sexualmente. Ese silencio obligatorio que los condena a no decir nada, sin ser culpables y que favorece a sus agresores. Por eso me animé a contar mi historia. https://t.co/DdEdMdYT50
— Vicky Dávila (@VickyDavilaH) 14 de julio de 2019
#estoyconvicky Dios les pague por el cariño. Escribí esta columna contando mi propia historia pensando en el silencio casi natural de miles de niñas y niños abusados sexualmente. El #MeToo habla por las mujeres abusadas, nosotros hablemos por los menores https://t.co/DdEdMdYT50
— Vicky Dávila (@VickyDavilaH) 14 de julio de 2019