Uno de los primeros nombramientos que hizo Iván Duque cuando ni siquiera se había posesionado como presidente fue el de Gloria Alonso, quien desde el 7 de agosto pasado tomó las riendas del Departamento de Planeación Nacional. Su nombre, desconocido para muchos, llegó al presidente con la bendición de Óscar Iván Zuluaga, quien después de no poder ser candidato en las elecciones pasadas se la jugó por Duque en los últimos meses de campaña.
Gloria Alonso es una buena conocida de Zuluaga desde sus tiempos en el Ministerio de Hacienda, durante el gobierno de Álvaro Uribe. Zuluaga, quien estuvo al frente de la cartera desde 2007 hasta el final del gobierno, nombró a Alonso directora de Política Macroeconómica en 2009 por recomendación de su viceministra Natalia Salazar, cargo en el que logró mantenerse con la llegada de Juan Manuel Santos a la Presidencia, quien en menos de un año ya había roto relaciones con su jefe político. Santos nombró a Juan Carlos Echeverry en Hacienda y Alonso se acomodó con su nuevo jefe, y se mantuvo en el cargo hasta 2012, mismo año en que Echeverry también abandonó el ministerio.
La directora de Planeación llegó al gobierno Duque con licencia del Banco de la República. Alonso, economista de la Universidad de Los Andes, se inició en la entidad en 1988, en donde fue nombrada dentro del Sector Externo, pero también fue jefe de los sectores financiero y de programación macroeconómica, y directora del departamento de comunicaciones y de educación financiera. Para ser nombrada en Planeación, Alonso le puso pausa a su contrato con el Banco, mientras hace su tránsito por el gobierno, sin embargo, aún está vinculada a la entidad financiera.
Su paso por la cartera de Hacienda junto a Zuluaga y Echeverry le abrió las puertas en la liga de los grandes economistas, y su formación académica la respaldó en los cargos a los que llegó. En 2015, el entonces contralor Edgardo Maya la nombró su mano derecha, convirtiéndose en vicecontralora, para abordar lo que en ese momento era la desaceleración de la economía. A Maya lo convenció su conocimiento en macroeconomía.
Gloria Alonso llegó a Planeación para capotear el Plan Nacional de Desarrollo, junto al ministro de Hacienda Alberto Carrasquilla, quien no ha tenido una buena relación con el Congreso desde que comenzó el gobierno. Sin embargo, el primer chicharrón no fue en el capitolio, sino puertas adentro. En el PND que presentó Duque, el manejo del presupuesto de inversión del Planeación Nacional pasaba a ser controlado por Carrasquilla y no por Planeación, como ha ocurrido tradicionalmente, dejando a la entidad prácticamente sin dientes para funcionar. Internamente, la disputa la tuvo que zanjar Duque, quien decidió darle el control al Ministerio de Hacienda, aunque se haría de manera progresiva, como lo reveló La Silla Vacía.
Sin embargo, ese punto del PND fue tumbado en el Congreso, que no vio nunca con buenos ojos ese cambio en el manejo del presupuesto, y a último minuto lo sacó del articulado. Alonso junto a Carrasquilla lograron salvar la propuesta cuando ya se veía hundida, y convencieron a los congresistas Luis Eduardo Diazgranados, Arturo Char y Mauricio Gómez Amín de votar favorablemente la agonizante ponencia. El tema Electricaribe fue clave para la bancada costeña de darle la espalda a sus partidos y jefes políticos.
El PND ha recibido críticas de todos los sectores, y Alonso deberá capotear cada uno de los temas para que su Plan no muera en el Congreso y termine siendo firmado por decreto.