La prohibición mundial de usar los aviones estadounidenses Boeing 737 MAX está golpeando a decenas de aerolíneas en el mundo. Y es que cuando China, la Unión Europea y Estados Unidos decidieron cerrarles su espacio aéreo a estos aviones, los demás países se vieron obligados a seguir el mismo camino y cerca de 800 vuelos diarios alrededor del mundo quedaron cancelados. Los números hablan por sí solos: en total son 371 aeronaves fueron parqueadas y 68 empresas ya empiezan a sufrir las consecuencias. Los dos accidentes en Etiopía e Indonesia en los últimos seis meses y que dejaron 346 personas muertas, hundieron la línea de Boeing.
Sin embargo, lo que para muchos es una crisis, para otros es un golpe de suerte. Avianca, del poderoso empresario Germán Efromovich, es inmune a esta situación porque en su historia reciente la aerolínea siempre ha negociado sus aviones de corto y medio alcance con Airbus, la otra gigante que construye aviones y tiene origen europeo. El 85% de la flota de Avianca es de marca Airbus y los pocos Boeings que tiene son los 13 aviones de ultra largo alcance Boeing 787, con los que llega a Europa, Chile y algunas ciudades estadunidenses.
El compromiso de Avianca con la europea Airbus la convierte en una de las dos aerolíneas en el mundo que tiene todas las familias de aviones Airbus de corto y mediano alcance, los mayores competidores de la familia 737 de la norteamericana Boeing. Este título lo comparte con la francesa Air France.
Los históricos rivales de Avianca se están quedando atrás con esta azarosa situación porque todas han adquirido aviones Boeing. Por ejemplo, la panameña Copa Airlines, que tiene una flota de 105 aeronaves, negoció con los norteamericano 88 Boeings 737 y los 17 restantes son de la familia brasilera Embraer. Además, tiene una orden de 77 Boeings 737 MAX, de los cuales ya se entregaron 8 que hoy se encuentran guardados en el aeropuerto de Tocumen, en Ciudad de Panamá.
Aunque Avianca ha intentado posicionar a Bogotá como un centro de conexiones a nivel regional tanto en Suramérica como Centroamérica, Copa siempre le ha hecho frente con los precios, destinos y hasta frecuencias. Sin embargo, con los 8 aviones que ahora tienen parqueados, por lo menos 22 rutas que también tiene Avianca tuvieron que ser cancelados.
Pero Copa Airlines no es la única que competidora de Avianca que salió perjudicada. Aeroméxico ha sido históricamente la aerolínea por excelencia que cubre la ruta Bogotá – Ciudad de México, uno de los trayectos internacionales más frecuentes y ocupados desde y hacia Colombia. Hay 9 vuelos diarios, de los cuales la mexicana opera 3, todos con Boeing 737 MAX. Ahora, como mínimo, la mexicana tendrá que cambiar de aviones, pero esto implica un difícil trámite logístico interno y externo del que Avianca sabrá sacar provecho.
Finalmente, American Airlines, otro competidor de Avianca para sus vuelos a Estados Unidos, también recibió un duro golpe. Esta vuela a 6 ciudades colombianas, tiene 19 aviones Boeing 737 MAX, de los cuales 2 eran utilizados para cubrir rutas desde y hacia el país. Es decir que, al menos, 2 vuelos diarios de Bogotá y Medellín que la estadounidense cubre, también deberá tener una reasignación de flota, lo que inmediatamente provoca un revolcón en los precios de los tiquetes.
Sin quererlo, Avianca quedó como la gran ganadora para fortalecer sus rutas a Estados Unidos, México, Centroamérica y Suramérica. La aerolínea de Efromovich no ha podido recuperarse aún del paro de pilotos y las quejas de sus pasajeros son constantes, pero con esta situación no habrá muchas otras posibilidades a la hora de viajar, lo que llevará inevitablemente a Avianca a fortalecerse mientras sus rivales en el mercado intentan responder a las normas de seguridad que condenaron al Boeing 737 MAX en más de 60 países.
