Con cortesía pero con firmeza el empresario Carlos Enrique Moreno le hace seguimiento a cada uno de los programas con los que se ha comprometido el gobierno del presidente Iván Duque. Sector por sector, cartera por cartera, ministros y directores de departamentos tienen la sombra de este expresidente del Grupo Corona y cuñado del presidente Álvaro Uribe quien los persigue sutilmente con una matriz de seguimiento, adecuada de las que utilizan los CEO en el sector privado. La matriz entra en el detalle de las ejecuciones y logra identificar obstáculos y dificultades para poder avanzar. Busca volver transversales las órdenes del presidente Duque quien tiene en Moreno, un escudero mayor que invita a la mayoría de reuniones que preside en el Palacio de Nariño.
El estilo del empresario es discreto pero eficiente y está con el gobierno Duque haciendo frontalmente lo que no pudo hacer con su cuñado, a quien aconsejaba pero sin mando ni posibilidades de desplegar su capacidad de ejecución. Es el único hermano de Lina Moreno, con quien tiene mucha cercanía y ha sido inspirador, igual que el paterfamilia Darío Moreno quien falleció el año pasado, de Tomás y Jerónimo a quienes les interesan fundamentalmente los emprendimientos y negocios.
