En 2011, Carlos Valdés fue nombrado director de Medicina Legal por el fiscal encargado Juan Carlos Forero, y se sostuvo como subalterno de cinco fiscales distintos, empezando por Viviane Morales. Sin embargo, esta vez no aguantó los cuestionamientos por las inconsistencias en la muerte de Jorge Enrique Pizano, después de reconocer que la mancha de sangre en la toalla encontrada con la que validaron su ADN al final no era de él. Valdés fue quien le entregó personalmente al fiscal Néstor Humberto Martínez el pasado viernes 16 de noviembre los resultados de la necropsia que confirmaban la causa de la muerte del exauditor de la Ruta del Sol por un infarto en el miocardio.
Medicina Legal dejó de ser una dependencia independiente administrativamente desde la Constitución del 91 que la convirtió en un departamento adscrito que le reporta al Fiscal General. Ahora Martínez tiene la potestad para nombrar al nuevo director, quien llevará su sello personal.