María Fernanda Carrascal:
Admiro y respeto tu compromiso con la verdad y la transparencia en nuestro país, la promoción del rechazo a la corrupción en el Estado y la invitación a los ciudadanos a la conciencia crítica. Sin embargo, considero que promover masivamente el cierre de cuentas y productos en Grupo Aval y el hashtag en redes #NoAlGrupoAval no es una forma adecuada de protestar, te diré el porqué:
- Grupo Aval no es únicamente propiedad del Sr. Luis Carlos Sarmiento Angulo, en su composición accionaria[1] figuran además de empresarios colombianos y empresas del exterior, personas naturales colombianas que adquirieron acciones con las entidades del Grupo. En pocas palabras, Grupo Aval pertenece también a muchos ciudadanos colombianos que poseen desde una acción en adelante en las entidades del grupo.
- Grupo Aval cuenta con más de 80.500[2] colaboradores que se verían perjudicados de prosperar la iniciativa y no me refiero únicamente al trabajador, también a sus familias, pues su salario constituye el apoyo económico de sus seres queridos. Promover el #NoAlGrupoAval afecta en forma directa a este significativo grupo de trabajadores en quienes es necesario pensar. Conocemos la realidad económica y laboral del país e iniciativas como estas traen más consecuencias negativas que efectos positivos o soluciones verdaderas.
- Aval también contrata a empresas y contratistas colombianos que prestan sus servicios de papelería, marketing, tecnología, asesoría legal, vigilancia, consultoría, publicidad, aseo, servicios de mantenimiento, ingeniería, entre otros, quienes a su vez contratan empleados para suplir la demanda de servicios del grupo y cuyos contratos configuran una alta fuente de ingresos que les permite generar empleos y desarrollo para el país y que también se están viendo afectados.
- En cuanto al caso de corrupción de Odebrecht que actualmente se encuentra en investigaciones, la filial de Grupo Aval que ha sido mencionada en el caso es Corficolombiana, una fiduciaria encargada de administrar recursos. En cuanto a las demás entidades del Grupo, y en particular los bancos, no se ha realizado ninguna acusación formal o se ha mencionado que también se encuentren implicados, por lo cual no es justificada la iniciativa en contra de estas entidades financieras, no existe razón de peso.
- A manera de ejemplo podemos decir que Grupo Aval se asemeja a una familia, cada entidad financiera es como un hijo y cada hijo actúa de forma independiente de acuerdo a los principios de sus padres, ¿verdad? en este caso el papel de padre lo ejerce Grupo Aval. En este orden de ideas, si uno de los miembros de la familia es acusado de un mal proceder no estaría bien juzgar a la familia entera, pues cada miembro es diferente e independiente en sus decisiones. En este caso se está acusando a todo el grupo por las supuestas actuaciones de una de sus filiales.
- En el caso Odebrecht, en líneas generales, lo que se ha dicho es que funcionarios de Corficolombiana conocían de la situación que se estaba presentando. Ahora bien de acuerdo con las investigaciones aún no se han encontrado pruebas que afirmen esta acusación.
- Grupo Aval cotiza sus acciones en la Bolsa de Valores de Nueva York, por este motivo es vigilado por la Security Exchange Comission (SEC), un ente de control que es sumamente riguroso y estricto en temas de corrupción, por lo cual el grupo se encuentra bajo un control constante y cuenta con controles de fraude establecidos en la ley Sarbanes Oxley y de los cuales la revisoría fiscal realiza auditorías trimestralmente. De acuerdo con el dictamen[3] realizado por la firma KPMG SAS hasta el momento no se han detectado desviaciones, ni evidencia alguna relacionada con el caso en mención.
- Para garantizar la calidad y el proceder de la firma Auditora existe la Public Company Accounting Oversight Board (PCAOB), una institución internacional que establece un sistema de supervisión nunca antes visto: elaborar y mantener un registro de firmas de contadores públicos; practicar revisiones recurrentes a dichas firmas, así como llevar a cabo investigaciones y establecer medidas disciplinarias a las firmas que practiquen auditorías a compañías públicas y defrauden la confianza de las autoridades y del público en general. Para el año 2017 la PCAOB realizó auditoría a la firma KPMG SAS en lo relacionado a sus procedimientos en Grupo Aval, el resultado fue positivo y no se encontraron errores o desviaciones que indicaran un mal proceder por parte de la firma y del Grupo Aval.
- Teniendo en cuenta lo anterior y los múltiples controles a los que se encuentra sometido el Grupo Aval en Colombia con la Superintendencia Financiera y en el exterior con las instituciones anteriormente mencionadas, es preciso afirmar que estas entidades no se expondrían a un riesgo de tal magnitud participando en hechos de corrupción que podrían significarle grandes pérdidas. En este orden de ideas creo que el proceder del grupo como tal ha sido conforme a las normas establecidas, sin embargo y como aún no hay una acusación en firme y pruebas fehacientes en contra es muy apresurado promover en redes sociales la culpabilidad del Grupo Aval en este tema.
- Por todo lo mencionado, considero que definitivamente no es la mejor solución esta protesta para luchar contra la corrupción porque esta debe erradicarse desde la raíz es decir directamente desde el estado. ¿Qué podemos hacer? En primera medida saber votar a conciencia.
Por último tengo dos inquietudes: la primera es, si además de esta iniciativa se cuenta con alguna solución o propuesta para los trabajadores, familias, empresarios y accionistas que no tienen incidencia alguna en el tema y que se están viendo afectados no solo por su empleo si no por los insultos e incluso amenazas que se reciben en redes sociales por el hecho de defender su trabajo, todas estas consecuencias se han derivado de la iniciativa, lamentablemente ha desatado no solo el pánico económico sino también violencia e intolerancia.
La segunda inquietud es si fue analizado el impacto que generaría en el país promover la iniciativa y las posibles consecuencias que traería a nivel social, económico y laboral para los trabajadores del Grupo, empresas y ciudadanos en general así como también para la economía colombiana, siendo consciente de que por el momento no se cuenta con pruebas irrefutables que justifiquen una campaña en contra de este grupo.
Aclaro que no deseo generar polémica, que esta carta refleja mi opinión personal e independiente como ciudadana, que absolutamente estoy en contra de los actos de corrupción y que admiro la lucha de muchos ciudadanos para tener un país equitativo y transparente, no obstante pienso que esta legítima lucha debe realizarse en favor de todos los colombianos, no buscando el cierre de empresas ni permitiendo que se presenten actos de violencia o intolerancia en contra de quienes opinan diferente.
Te solicito de la manera más respetuosa a instar a tus seguidores a reflexionar y evitar actos de violencia, vandalismo y ataques de todo tipo contra quienes no se encuentran a favor de la iniciativa. Mi objetivo no es otro si no dar mi opinión y soy consciente de que las personas tienen el derecho a elegir la entidad financiera que prefieran pero por elección propia.
[1] Ver composición accionaria Grupo Aval a 30 de septiembre de 2018 en www.superfinanciera.gov.co.
[2] Ver Informe de Gestión Grupo Aval a 31 de diciembre de 2017 en www.grupoaval.com.co
[3] Ver dictamen de auditoría de los Estados Financieros Separados y Consolidados de Grupo Aval en su página web: www.grupoaval.com.co o en la o página web de la Superintendencia Financiera de Colombia.
*Nombre modificado a petición del autor.