Mientras algunos punkeros escondían la mariguana dentro de las medias, otros se levantaban las crestas azules y moradas con el agua de los charcos estancados al borde del andén. Si algo recuerdan las personas que han ido a un Rock al Parque, son las duras requisas en las que los policías no tienen pudor para meterle la mano a las mujeres entre los senos y el pantalón, buscando los porros que se encienden con cada banda y forman una nube canábica que traba a cualquiera.
Rock al Parque es una leyenda. Son 28 años de guitarras eléctricas y baterías marchantes que ponen a saltar a cientos de miles de personas dispuestas a dejar la sangre en el pogo. Después de tanto tiempo, las generaciones se encuentran en un potrero para celebrar la vida. Este año no es la excepción. Aunque las criticas al cartel y las bandas nunca faltan, esperando melancólicamente volver a ver grupos que ya no existen, que no hacen giras, que solo la memoria mantiene vivos, detrás de ellos vienen otros dispuestos a destronar al rey y entrar al olimpo latinoamericano del rock, por donde ha pasado el flaco Spinetta, Control Machete, Sepultura o Aterciopelados.
Más que una recomendación, esta es una lista arbitraria de las bandas imperdibles en este nuevo Rock al Parque. No importa que no las conozca, que nunca haya escuchado su nombre o el género no sea el que más le apasiona, porque no es lo mismo escuchar la grabación de uno gritones al que no se les entiende nada, como los paisas de Masacre, que verlos en un escenario celebrando sus 30 años de carrera. Sí, la legendaria banda de death metal liderada por Álex Okendo está de cumpleaños y decidieron venir a Bogotá para recordar al primer baterista y uno de los fundadores de la banda, ‘Bull Metal’ Montoya y dar un concierto épico en su nombre.
Como ya es costumbre, el sábado estará lleno de mechudos dispuestos a aguantarse sol y agua para disfrutar del metal. Y nada más atractivo que ver a un pastuso metalero, no porque sea tierno, sino porque tienen la fama de ser los más aguantadores en los conciertos. Y para eso llega Vobiscum Lucipher, una banda con más de diez años de experiencia. Todos están atentos para escuchar ‘Batallas de Apostasía en el Reino de la Bestia’ con el recuerdo del festival Rock Galeras cuando hicieron una presentación para la memoria.
La cultura punk revivió con las Pussy Riot. Lo menos que les ha pasado es estar en la cárcel. Pero no porque estén tiradas en la calle tomando trago o rayando las paredes pidiendo anarquía, sino porque han querido enfrentarse a un estado machista que no ve con buenos ojos que las mujeres, delicadas e indefensas para los gobiernos más conservadores, lleven sus canciones a las calles. Si no sabe quiénes son ellas, piense en la final del Mundial en Rusia, cuando una mujer entró a la cancha en la mitad del partido protestando contra Putin y la FIFA. Las Pussy Riot van a cerrar Rock al Parque. Si los domingos son detestables, a las 9 de la noche punkeras harán temblar el Simón Bolívar con verdadero punk.
Rock al Parque tuvo que dejar el purismo del rock para no morir en el intento de convertirse en el festival de música más importante del continente. Y lo hicieron bien. Gracias a la decisión hemos podido ver grupos importantes y de gran calidad que hubiesen tenido que pegarse a otra tarima en la que nadie los iría a escuchar. Bienvenidos los chilenos de Chico Trujillo, unos fanáticos de la cumbia colombiana que supieron transformarla para que canciones como La medallita no se quede en las generaciones más viejas y sabias. La voz de Aldo Asenjo, encantadora y melódica, acompañada de unos monstruos en las guitarras, percusiones y vientos, pondrán a bailar hasta a la señora que vende los porros y el guaro.
Los festivales de música no son solo para escuchar las bandas que ya conocemos, mucho menos cuando la entrada es gratis. La maravilla de Rock al Parque está en descubrir grupos que ni siquiera pensábamos que nos podrían gustar. En sus tarimas se formaron las bandas más importantes de Colombia como La Mojiganga o Los Elefantes, incluso los de 1280 almas son hijos de Rock al Parque. Si a usted no le causa curiosidad ver una banda de ska japonés, mejor ni siquiera se aparezca en el Simón Bolívar durante todo el fin de semana. El lunes a las 6:30 p.m. la Tokyo Ska Paradise Orchesta se subirán al escenario y tocará esperar, pero seguro será una buena sorpresa.
Vaya a Rock al Parque, déjese sorprender por la música y las nuevas bandas, incluso es el lugar ideal para probar la marihuana si tiene curiosidad. La competencia está buena porque algunos decidieron irse para el Petronio Álvarez en Cali, el festival de música afro más importante del mundo (imperdible), pero usted que se queda en Bogotá, aproveche el puente y cuando pueda, responda este artículo y cuéntenos cuáles fueron las mejores bandas para usted.