Este 7 de agosto se posesionó Iván Duque como presidente de Colombia y con él llegaron los nuevos dirigentes de las diferentes carteras estatales.
Una de las más importantes es la del Ministerio de Salud y Seguridad Social, donde el presidente Duque, que llega de la mano de Juan Pablo Uribe Restrepo, nuevo ministro de Salud, deberá enfrentar grandes retos debido a la crisis general que atraviesa el país.
Actualmente el Sistema General de Salud y Seguridad Social (SGSSS) sufre una crisis en sus finanzas e inoperancia en la prestación de servicios a los diferentes usuarios. Para 2016 más de 250 hospitales públicos, de los 947 existentes en el país, tenían un alto riesgo financiero. ¿Cómo se encuentra el panorama? Miremos.
Cartera y finanzas: el nuevo gobierno recibe una cartera asfixiada por una deuda de las Empresas Promotoras de Salud EPS a las clínicas y hospitales que supera los 8.2 billones de pesos, según el último reporte presentado por la Asociación Colombiana de Hospitales y Clínicas. Nueva EPS, Savia Salud y Coomeva encabezan la lista de deudores en el sistema.
Actualmente más de 26 millones de colombianos están afiliados a una EPS, las cuales se encargan de la administración de recursos y aseguramiento de la atención, para tal fin se ejecutan procesos de contratación con las IPS públicas y privadas en busca de la garantía del derecho a la salud. Lamentablemente, el pago a estas instituciones no está llegando oportunamente.
Según lo manifestado por el director general de ACHC, Juan Carlos Giraldo, el 60% de la deuda corresponde a carteras en mora, con un atraso de hasta 200 días previa presentación de la facturación generada de la prestación de servicios y suministro de tecnologías en salud. Los mayores deudores a clínicas y hospitales son Nueva EPS y Savia Salud con 800 mil y 600 mil millones respectivamente.
Solo en Córdoba la deuda a clínicas y hospitales supera los 300 millones de pesos, concentrados en su gran mayoría en dos EPS (Emdisalud y Comfacor). Actualmente Supersalud tiene en la mira más de 13 EPS y otras más intervenidas en todo el territorio nacional, debido a las inconsistencias encontradas en la revisoría fiscal ejecutada. El fraude en el recobro al ADRES y nóminas paralelas, los mayores agravantes.
Atención de la salud: la crisis financiera del sector torpedea la atención de las diferentes necesidades y requerimientos de los usuarios. Actualmente el 30% de las clínicas y hospitales no cuentan con insumos médicos, medicamentos y personal médico para la prestación del servicio. La deuda con proveedores supera los 90 días en mora y el pago a los trabajadores del sistema tiene atrasos de 6 a 18 meses en promedio, sin contar con que la falta de pago a estas IPS tiene a más de una al borde del cierre.
Estos son unos de los retos que asume el nuevo gobierno.
