El primer efecto de la Ley de sometimiento a la justicia de las Bandas criminales que sancionó esta semana el presidente Santos será la entrega de alias Otoniel, el jefe máximo de las Autodefensas Gaitanistas de Colombia cuya entrega está prevista para la semana entrante. Detrás de la negociación están el arzobispo de Cali, Monseñor Darío de Jesús Monsalve, y el obispo de Apartadó, Hugo Torres, quien tiene gran influencia en el Urabá antioqueño cuando llegó en 2014 a la región donde Otoniel ha tenido el epicentro de sus acciones. La presencia de los sacerdotes ha sido clave para darle la confianza al grupo de Otoniel, de la misma manera que lo hizo en su momento el padre Rafael García Herreros para el sometimiento de Pablo Escobar y su grupo de narcos que terminaron en la cárcel de La Catedral, durante el gobierno de César Gaviria Trujillo.
