¡Es el colmo! Promoambiental, la empresa encargada de recoger las basuras en buena parte de Bogotá, es la que más contaminación plástica genera con esas bolsitas grises que dicen ser biodegradables.
Hay que ser muy inconsciente o ignorante, ambientalmente hablando, para por un lado ofrecer el servicio de limpieza a la ciudad, y por el otro generar basura con miles o tal vez millones de bolsas plásticas.
Y lo peor del caso es que las autoridades del distrito, empezando por el alcalde Peñalosa, son las primeras en permitirlo o hasta fomentarlo.
Desde que entró en operación, la empresa Promoambiental Distrito ha estado encargada de recoger las basuras, incluidas las de las canecas públicas, en buena parte de la ciudad, en localidades de la zona 1 como Usaquén, Chapinero, Santa Fe o Candelaria, entre otras.
Y lo hacen cubriendo el interior de la caneca con unas bolsas grises que dicen ser biodegradables, pero que al fin al cabo son de plástico y que tarda algún tiempo en degradarse, con el riesgo de que muchas terminen en el río Bogotá y por último en el mar.
Cabe recordar que cada vez son más frecuentes las tristes noticias del hallazgo de ballenas muertas a las que les encuentran el estómago repleto de bolsas plásticas, como ocurrió recientemente en las costas de España y Tailandia.
De hecho son tantas las bolsas plásticas que Promoambiental desperdicia, dejándolas a la orilla de andenes y separadores, que a veces pasan varios días ahí antes de que un camión se dé cuenta y las recoja.
Lo peor del caso es que la empresa está empleando esas bolsas con fines absurdos, como por ejemplo meter ahí residuos vegetales insignificantes, como ocurrió recientemente en el sector de Rosales, en Bogotá, donde se introdujo una pequeña rama de árbol en una de esas bolsas, rama que de otro modo pasaría inadvertida y hasta se descompondría por sí misma en el césped.
¿Cuánto están costando a Promoambiental estas miles de bolsas y por lo tanto al distrito (recursos que podrían destinarse a mejores propósitos)?
Se le está haciendo tarde al ineficiente alcalde Peñalosa (y a las autoridades ambientales del país) para revaluar y eliminar un método de recolección de basuras en las calles a todas luces despilfarrador y ambientalmente irresponsable.
¿No es vergonzoso que la empresa que en sus políticas presume “respetar el medio ambiente” sea la que más bolsas plásticas, aunque digan ser biodegradables, está botando precisamente al medio ambiente?
