Director: Jean-Marc Vallée. Escritores: Craig Borten, Melisa Wallack
Actores: Matthew McConaughey, Jennifer Garner, Jared Leto.
En Dallas, Ron Woodroof, un técnico eléctrico apasionado por el rodeo, es diagnosticado con SIDA. Es 1985 y aún se cree que los que padecen esta enfermedad son homosexuales, a los cuales detesta Ron. Woodroof se niega a aceptar su enfermedad, y luego se niega a dejarse ir, por lo cual busca por todos los medios legales y no, medicamentos que lo mantengan con vida. En su búsqueda se encuentra con un médico exiliado en México, que conoce cómo mejorar los síntomas de los portadores de VIH, y quien se convierte en su proveedor de drogas que aún no han sido aprobadas en Estados Unidos. Para venderlas a los enfermos de SIDA Woodroof en alianza con Rayon, un travesti que conoció en la clínica, crea el Dallas Buyers Club.
La película es una lucha económica y moral entre la FDA (Food and Drug Administration, que es el ente regulador de los medicamentos en EEUU), los médicos, los enfermos y Ron Woodroof. Los enfermos tienen poco tiempo de vida y necesitan drogas que los curen, los médicos no las tienen disponibles y lo único que pueden hacer es incluirlos en estudios clínicos de ciertas drogas que se encuentran en prueba, la FDA es demorada en tomar decisiones y no permite vender drogas que han sido probadas en otras partes del mundo, y Ron Woodroof llena ese vacío que deja el sistema suministrando medicinas a los portadores del VIH que funcionan en otra parte del mundo, lucrándose con ello.
Dallas Buyers Club narra desde afuera las consecuencias del manejo que le dan los laboratorios y algunas entidades gubernamentales a los medicamentos, enfocándose en el negocio y no en la salud de la población.
Por otro lado, puede ser una película peligrosa, en el caso del SIDA las autoridades fueron lentas en reaccionar, sin embargo, eso no significa que los médicos de todo el mundo actúen en contra de la salud de las personas con enfermedades crónicas por obtener dinero, por negligencia, o por desconocimiento, es absurdo generalizar. Ahora existen muchos “gurús” del cáncer, que con comida saludable prometen curarlo. Y aunque se han visto casos, la mayoría de veces su beneficio simplemente no existe. Es preferible acudir a la medicina tradicional que ha tenido años de evolución y se ha comprobado científicamente ser eficaces en la mayoría de los casos.
De su director Jean-Marc Vallée teníamos referencias con su película Café de Flore (http://www.cinejuntos.com/profiles/blogs/cafe-de-flore), en la cual nos muestra su forma de narrar cercana a sus personajes, acariciándolos, buscando su redención, en finales no necesariamente felices.
En Dallas Buyers Club se muestra la fobia contra la población LGBTI, los prejuicios que cada vez son menos, pero que existen. Ron Woodroof es machista, borracho, drogadicto, (lo único que le falta es ser republicano, aunque eso no lo sabemos) y odia a los homosexuales. Sin embargo, desde que fue diagnosticado con SIDA, el contacto con Rayon cambió su forma de ver a los homosexuales, llegando a respetarlos.
Dallas Buyers Club es ante todo una lección de respeto, por las personas diferentes, por los que están condenados pero quieren vivir, por los médicos, por la vida. Recomendada para todos, sobre todo para ir acompañado de ese amigo homofóbico, que la mayoría tenemos.
Las actuaciones de Matthew McConaughey y Jared Leto son espectaculares, sencillamente merecen el Óscar.
Este post apareció originalmente en: www.cinejuntos.com