A pesar de que en artículos anteriores (El que diga Colombia y Cómo elegir al que diga Colombia) había insistido en un gobierno compartido por los tres candidatos alternativos, hoy día considero oportuno que estas tres fuerzas no se hayan unido para la primera vuelta; es más, considero adecuado que ahora Fajardo, De la Calle, Robledo y otros líderes de opinión manifiesten su intención de votar en blanco. VVoy a explicar por qué:
Si los tres candidatos se hubieran aliado antes de la primera vuelta no hubieran desarrollado por aparte esa formidable campaña que hicieron desde las tres orillas, ni hubieran cautivado la cantidad de votos que obtuvieron. Se presentaron como alternativa para todos los gustos que no compartían la posibilidad de un nuevo gobierno de Uribe en cabeza de Duque y esto llevó a millones de colombianos a las urnas.
Si después de la primera vuelta Fajardo y de la Calle hubieran hecho alianza con Petro, gran parte de sus seguidores se hubieran sentido traicionados y muchos de ellos se hubieran ido por el voto en blanco y algunos incluso hubieran terminado en las toldas de la campaña del Centro Democrático; además, el logro extraordinario de generar una gran coalición con mirada de futuro se hubiera diluido entre las huestes de la Colombia Humana.
¿Qué va a pasar ahora, para que se cumpla esta predicción?
1. Ya está claro que toda la maquinaria (sinónimo de corrupción) se alineó con Duque. Allí están todos; se fueron enfilando uno a uno y un país que está en lucha frontal contra la corrupción, los tiene ahora reunidos sin necesidad de buscarlos.
2. A la Colombia humana le queda una tarea sencilla: mostrar esa cruda realidad, evidenciarla, señalarla e incluso confrontarla. Así tendrá de su lado a la mayor parte del pueblo colombiano que está próximo a votar la consulta contra la corrupción. En un sentido práctico, los millones de votos de la consulta contra la corrupción serán contra la campaña que la representa.
3. La primera encuesta realizada después de la primera vuelta da como resultados 55% para Duque y 35% para Petro. ¿Cómo interpretar este resultado? A Duque ya le llegaron todas las adhesiones de los partidos de la maquinaria y tiene todo el uribismo de su parte; prácticamente no hay indecisos que tomen el camino de Duque/Uribe; su campaña de miedo y mentira ya recogió todo lo que podía recoger y eso se demuestra comparando este dato de la encuesta con la votación del plebiscito.
4. A Petro le queda todo el margen de votantes indecisos y de nuevos votantes que a través de una campaña bien manejada seguramente irán concurriendo en esa dirección. Entonces, a medida que transcurran los días, los porcentajes de votación se irán acercando.
5. La campaña iniciada por seguidores de Fajardo y De la Calle que han adoptado una serie de consignas como: #NosTocóLiderarANosotros o #NoDejemosEnBlancoLaPaz y cientos de otras iniciativas de jóvenes, mujeres, minorías étnicas y académicos están liderando un proceso desde la base, para sumar fuerzas a la Colombia Humana y para lograr la alianza con los otros dos candidatos.
6. Antanas Mockus ya ha dado señales de tomar una decisión por la Paz y es bien seguro que su acción no se limite a confirmar su voto sino que ponga toda su creatividad al servicio de la campaña de la Colombia Humana.
7. Es posible que todo este proceso de ascenso de Petro en las encuestas, la presión de sus bases y la oferta de Petro de generar un cogobierno en torno a un acuerdo sobre lo fundamental, logre que a última hora, cuando ya se sienta que solo falta un leve empujón para que no triunfe lo que sería un futuro aciago para Colombia, Fajardo, De la Calle, Robledo, Claudia y todos los líderes de opinión que están cerradamente en contra del uribismo, se unan al clamor de la mayor parte del país y así triunfe lo que bien podría ser un gobierno de una gran coalición, con poder para desarrollar las valiosas propuestas de las campañas que llegan a ella.
¿Qué se requiere para que esta predicción se haga posible?
Como es tan difícil convencer con razones a las personas que tienen un alto nivel de prevención por Petro, se requiere diseñar ya, una campaña que active el poder de lo simbólico, que penetre en el corazón y las entrañas de la gente y no solo en su cabeza, que se haga desde una perspectiva amorosa, con cuidado, con respeto y en esto el profesor Mockus es especialista.
Solicito amablemente entonces a Antanas Mockus para que convoque a un grupo de personas con capacidad para diseñar los dispositivos, artefactos, estrategias con un poder simbólico capaz de congregar al pueblo colombiano en torno a este fin.
Una inmensa ola de aguas contaminadas se cierne sobre Colombia... ohhh, ¡milagro! sobre una gigantesca ola de alegría, de transparencia de equidad y de paz empieza a navegar el pueblo colombiano.
