La guerra entre el ELN y el EPL tiene en jaque al Gobierno y las Fuerzas Militares en el Catatumbo. El pasado 23 de abirl el vicepresidente Óscar Naranjo llegó a la región con el ministro del Interior Guillermo Rivera y el comisionado de paz Rodrigo Rivera; sin embargo, la crisis humanitaria parece no tener salida. Aunque Naranjo aceptó en una entrevista en RCN Radio que desde el Estado habían fallado y el gobierno se había demorado en reaccionar. Aunque las Fuerzas Militares ya enviaron 2.000 nuevos soldados al Catatumbo, los grupos armados son los que siguen imponiendo su ley. El EPL acaba de dar una tregua de tres días al paro armado que comenzó desde el pasado 15 de abril, pero la gente sigue inconforme y la presencia de las autoridades no parece dar tranquilidad. Más de 6.000 desplazados, 45.000 niños pararon clases por el peligro y centros como Ocaña están recibiendo a las personas, aunque ya no dan abasto. Jorge Solano, líder social y defensor de derechos humanos, criticó hace unos días a la alcaldesa del municipio, Mirian Prado, por estar de vacaciones en medio de la emergencia humanitaria.
