“Hace ya muchos años que no existen los países, la frontera está en la piel de cada uno y todos nuestros nietos serán grises”.
Somos el departamento del Quindío, el segundo más pequeño de Colombia, aquel que solo cuenta en sus filas con 12 municipios, cuya extensión geológica aún se considera muy virgen, aunque en los últimos años, hemos estado luchando contra el yugo de la minería (herencia que nos dejó el gran Álvaro Uribe Vélez), pero que afortunadamente y por un extraño sentido de pertenencia, nuestra gente ha votado no a la minería, y con porcentajes muy elevados en contra de esta. Destello de fe en la humanidad. Nos caractericemos por ser el menos destacado del llamado triángulo del café o como lo conoces tú, “eje cafetero”. Tenemos un clima perfecto: en las mañanas te levantas con mucho frío; a las doce del día, te encuentras con un sol de mil demonios, y cuando cae la tarde y llega la noche, eventualmente caerá lluvia sobre ti, pero aun así, bipolar y dual, tenemos el mejor clima, o bueno, eso te intentan vender.
Una vez ubicado aquí, te encontrarás con un excelente sistema de movilización vehicular. En el pasado, nuestros gobernantes no se anticiparon al posible desarrollo social y económico de nuestro departamento, siendo más específico, en nuestra capital, Armenia “la ciudad milagro” se construyó de una forma vertical, lo que imposibilita la ampliación de las calzadas. Dado esto, estaremos eternamente condenados a vivir con limitaciones pavimentisticas (sé que esta palabra no existe, pero es mi escrito y la puedo usar), pero esto no es de tu incumbencia, así que ven y ocupa más espacio en nuestras carreteras, serás un vehículo más estancado en el embotellamiento vehicular, causado por tus colegas regionales que se te adelantaron.
A nosotros los cuyabras nos vendieron la idea de que la masiva migración proveniente principalmente de Bogotá iba a mejorar nuestra economía, ya que estos rolos llegarían con su dinero a invertirlo en nuestro mercado y con esto se generaría más empleo y crecimiento económico para los nativos y la ciudad. He ahí el error. Los prenombrados salvadores de la economía quindiana han hecho todo lo contrario, pues dichos seres, en su mayoría son gente adulta, que vienen a postrar su trasero en un apartamentos, que para colmo, los encargados de construirlos son contratistas que vienen de otros departamentos y con ellos vienen sus obreros, mayoritariamente del valle. Así que nuestro crecimiento económico se lo llevan dichos contratistas y la oportunidad laboral, de igual forma. ¡Oh, gran retórica y persuasión discursiva, que con tus gestas eres capaz de manipular a un pueblo, usando viles humanos para llevar tu legado! Perdón, en ocasiones me excedo verbalmente. Cabe resaltar que la mayoría de habitantes de dichos apartamentos, es decir, los foráneos, es decir, los que vienen a postrar su trasero, son gente ya pensionada y en el declive de su vida, así que por lo regular vienen a descansar y a estar en sus bonitos apartamentos, y obvio, no gastan su dinero en actividades mundanas o gastronómicas que ofrece la ciudad, lo que conlleva a otra promesa rota, y es la de mejorar nuestra economía y el crecimiento de nuestros negocios.
Además de no aportar nada, vienen a acabar con nuestros recursos hídricos, ya que la excesiva población ha hecho que nuestras reservas tengan tiempo de vida muy limitada y hasta ahora el actual mandatario no ha movido un dedo para subsanar este preocupante problema, así que negro será nuestro color, aquel que escribirá nuestro futuro.
Querido lector anónimo, no quise sonar xenófobo o regionalista con este escrito que acabe de redactar, tampoco quiero que te sientas ofendido por algunos feos usos del lenguaje, pues lo utilicé para sintetizar bien una idea. Mi punto es que al Quindío lo están explotando y en unos cuantos años, todos saldrán huyendo y nos dejarán las ruinas de sus aventuras a nosotros, los que nos duele nuestra tierra. Los rolos me caen bien, su acento me encanta y ya me he acostumbrado a oírlo en mi universidad y en cuestiones de socialización con frecuencia. Nosotros los recibimos con brazos abiertos solo que por favor, te pido, que te apropies del departamento, quiérelo y sobre todo, valora lo que somos. Gracias.
Psdta: La globalización es el próximo paso de nuestra humanidad, los europeos ya empezaron, Francia y Suecia en los últimos años, han recibido a millones de africanos y musulmanes en sus tierras, lo que les ha aportado un gran crecimiento cultural y deportivo a sus ricas historias.
