Hace unos días leí varias columnas que decían que gracias a la Constitución del 91 nuestro país era un estado laico, es decir, que en el tema de religión es totalmente neutro y no apoya ni reprime ninguna expresión religiosa. Con base en esto se criticaba que los altos jerarcas de la iglesia salieran con el presidente Santos a anunciar en rueda de prensa que el santo pontífice vendría a Colombia.
También se ha criticado que Señal Institucional y Radio Nacional hagan seguimiento total a los cinco días que estará el papa, aludiendo que para eso la iglesia católica tiene sus propios medios de comunicación, como lo son Cristo visión, Radio María, Radio Minuto de Dios, etc. En la Constitución del 86 se decía “en nombre de Dios, fuente suprema de toda autoridad”, entonces se pegan de ello para hablar que éramos un pueblo sesgado regido por las mentiras de la iglesia en comunión del gobierno.
Ahora bien, nombraré la última critica importante, se dice que es absurdo que los colombianos tengamos que pagar el recorrido del papa, si ya bastante pobreza hay, que mejor ese dinero se debe invertir en algo como educación, salud o en los pobres. Adicionalmente, critican que el cuadro de la Virgen de Chiquinquirá deba ser transportado a donde esté Francisco, que se gastará mucho dinero y que si él desea verla pues que él sea el que se despliegue hasta allá.
Tal vez la crítica se sale de la razón y se convierte en un fanatismo contrario que pretende menoscabar la visita de Bergoglio. Para empezar es verdad que somos un estado laico, pero eso no impide que los gobernantes simpatizantes de la iglesia celebren y vean en esta visita algo que en muchos años no veremos. Si Señal Institucional y Radio Nacional desean transmitir los cinco días del recorrido, tienen todo el derecho, es obvio que un evento de esta magnitud generara los puntos más altos de sintonía, una gran oportunidad para estos canales dependientes de las finanzas del estado.
Si antes del 91 la Constitución profesaba “en nombre de Dios, fuente suprema de toda autoridad”, no significa que la población fuera ignorante o que los gobernantes se aprovecharan del poder de la iglesia, simplemente una época diferente, con menos diversidad de pensamiento y una forma más conservadora de ver la vida.
Para finalizar diré que las ciudades en las que estará Francisco se debe invertir en remodelación, acondicionamiento de calles, logística, seguridad, construcción de escenarios, entre otros. Se dice que en México se llegaron a gastar 165 millones de pesos mexicanos, más o menos $25.000 millones colombianos; sin embargo, este dinero no es para el papa ni para la iglesia, es para las ciudades, para su mejora. A ver si por fin se usa el dinero en la malla vial y en buenos escenarios. Además, no olvidemos el dinero que se moverá en el comercio minorista y mayorista. En cuanto al traslado de la Virgen de Chiquinquirá, diré que el dinero sale de la comunidad dominica, además de ser una buena vitrina ante el mundo para la reina de los colombianos.
En fin, no critiquemos sesgados por creencias contrarias, la idea es que si lo vemos del lado político, el gobierno tiene todo el derecho del mundo a dirigir y promocionar la visita. Además si es por el dinero, la oportunidad para que las ciudades inviertan en su infraestructura y seguridad, sin contar el comercio que se moverá, el resultado será la generación de nuevas fuentes de empleos directos e indirectos, sin contar con la remodelación de las urbes a recorrer.
